Los precios del petróleo tocaron sus máximos del año por la subida del dólar. En una jornada volátil, el precio del crudo alcanzó un nuevo máximo en siete años impulsado por la crisis en la frontera con Ucrania para superar nuevamente los US$90 por barril de Brent, pero finalmente terminó en baja a US$89,34.

En Nueva York, en tanto, el barril de West Texas Intermediate (WTI) para entrega en igual mes perdió 0,84% a US$86,61.

"El dólar dio un golpe duro al crudo tras la Reserva Federal", resumió Phil Flynn de Price Futures Group.

El banco central estadounidense, que señaló que piensa subir sus tasas desde marzo, "generó una ligera presión a la venta en el mercado petrolero", explicó Carsten Fritsch, de Commerzbank.

El dólar se fortaleció, y eso contribuye a bajar los precios pues el barril de crudo se vuelve más caro para inversores en otras divisas.

Por el contrario, para el país puede ser una oportunidad de sanear las finanzas fuertemente golpeadas por el efecto del covid-19.

Ante esta situación, Orlando Santiago Jácome, gerente de Fénix Valor, comentó que “cualquier país que tenga dentro de sus líneas de exportación el petróleo, pues por supuesto que será positivo”.

El analista además destaca que la combinación entre el valor de barril de crudo y la Tasa Representativa del Mercado, hacen que el precio que reciba la nación por cuenta del barril de petróleo sea la más alta de la historia, cerca de $350 mil por unidad.

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“Lo que está pasando es muy positivo en el caso de Colombia, la combinación del precio del petróleo y la tasa de cambio; estamos teniendo el barril de petróleo más alto de toda la historia. Por supuesto Ecopetrol arranca el año 2022 con el pie derecho y entendiendo que los ingresos que genera esta compañía le vienen muy bien al presupuesto que se dará para el 2023 y que se traza este año, aparte de todo se va a contar con ingresos extraordinarios por cuenta de la venta de petróleo”, afirmó Jácome.

En ese sentido, si las cuentas siguen de esta manera, el próximo presidente tendrá dentro sus cuentas un superávit con el que los últimos gobiernos no contaron, luego de la caída del precio del combustible en el año 2014.

Eso traerá un alivio fiscal para la nación. “Para cualquier país exportador de petróleo y que tenga una dependencia ligera de sus ingresos fiscales a partir de esta materia prima, pues por supuesto que es una noticia positiva y que le viene muy bien a Colombia para arrancar este 2022 económicamente con el pie derecho”, señaló el analista económico.

Estos precios que no se veían desde inicios de 2014, y podrían, sin duda alguna, ayudar a mermar el impacto económico que generó la pandemia del covid-19, además de ayudar a crecer la economía en la senda prevista, antes de la llegada de la emergencia sanitaria.

De igual manera, aliviará de manera significativa la deuda que ha adquirido el gobierno y permitirá realizar mayores inversiones.