Scotland Yard ha pedido a Sue Gray, subsecretaria permanente de la Oficina del Gabinete de Boris Johnson y encargada de la investigación interna sobre las fiestas supuestamente organizadas en Downing Street durante la pandemia, que haga "referencias mínimas" a dichos eventos en la publicación de su documento mientras la Policía continúa con la investigación.
Así, la entidad ha solicitado que sean precisamente las cuestiones que está investigando las que sean retiradas del informe al menos de momento, en plena ola de críticas contra el primer ministro, Boris Johnson, que podría acabar enfrentándose a una moción de censura.
"Para aquellos eventos que están siendo investigados por la Policía Metropolitana de Londres hemos pedido que se hagan referencias mínimas en el documento interno del Gabinete", ha indicado en un comunicado la Policía.
No obstante, ha aclarado que la Policía no ha pedido que se limiten otras cuestiones o que la publicación del informe "se retrase" sino aquellas cuestiones que podrían "perjudicar la investigación" de los agentes.
Los miembros del Gobierno se encuentran aún a la espera del llamado 'informe Gray' sobre las fiestas del Número 10, si bien el 'premier' británico afirmó que "de ningún modo" está retrasando la publicación del informe. Además, ha prometido que una vez se termine será publicado íntegramente.
Sin embargo, el informe parece retrasarse. Un alto cargo ha indicado que "habrá que preguntar a Gray" los motivos del retraso dado que es "ella la que decide". "Está valorando la situación y hablando con abogados y miembros de la Policía sobre qué cuestiones pueden ser reveladas", ha aclarado, según informaciones del diario 'The Guardian'.
Downing Street aún no ha recibido el documento, mientras la tensión crece en Reino Unido por si el Gobierno decide no publicarlo de forma completa. Johnson no se mostró explícito sobre este extremo, cuestionado por el asunto por el líder de la oposición, Keir Starmer.
Así, el mandatario lleva días bajo una intensa presión debido a las informaciones que apuntan a la celebración de varias fiestas en Downing Street durante los momentos más duros de la pandemia al tiempo que insiste en no dimitir.