Al reclamar medidas para reducir el déficit fiscal este año, la calificadora de riesgo Fitch Ratings analizó el informe del Plan Financiero que presentó el Ministerio de Hacienda hace pocos días. La primera reacción de la agencia destaca que los resultados fiscales de Colombia en 2021 mejoraron por un PIB nominal más fuerte de lo previsto.
No obstante, las perspectivas a mediano plazo se verán influenciadas por las elecciones a finales de este año, indicó la firma. Fitch hace alusión al hecho de que el déficit fiscal del gobierno central estimado para 2021 fue del 7,1% del PIB, 0,7 puntos porcentuales menos que en 2020 y 0,5 puntos porcentuales menos que la estimación del gobierno de diciembre.
“Esto implica un déficit para 2021 de alrededor del 6,5% del PIB, en comparación con el pronóstico de 7,3% de Fitch de diciembre. La previsión de déficit del gobierno para diciembre fue en sí misma 1,5 puntos porcentuales inferior a lo presupuestado originalmente”, señaló Fitch en su más reciente comentario.
Ante esta situación, EL NUEVO SIGLO quiso averiguar qué tanto de lo que dice la calificadora se puede cumplir durante este año respecto a las medidas para reducir el déficit fiscal.
El gasto público
El analista económico y experto en macroeconomía, Orlando Santiago Jácome, sostuvo a este diario que la reducción del gasto público es el factor principal para frenar y disminuir este déficit. Indicó que “el déficit fiscal puede resultar con un mejor índice, como ya lo ha mencionado el ministro de Hacienda. La razón es el impacto en las finanzas que va a tener Colombia a partir del precio del petróleo, que definitivamente está cotizándose muy por encima de los presupuestos realizados en el 2021. Esto sumado a la recuperación de muchos sectores de la economía que evidentemente ya están en una situación poscovid, lo que indiscutiblemente va a ayudar a los ingresos del Estado. Ya se ha hablado de una reducción cercana a 2 puntos porcentuales del déficit fiscal, pasando de una cifra cercana al 6%”.
Dijo el analista que “lo que también se debe tener en cuenta es que este es un año electoral y, sin duda, eso influenciará en esas proyecciones. En un año de elecciones como el 2022, no solamente debe ser el compromiso del Gobierno saliente, sino también del entrante, para no seguir desbordando la parte del gasto que es definitivamente por donde se ha incrementado el déficit fiscal y de esta forma continuar o intentar, mantener unas finanzas un poco más sanas evitando los gastos que en muchas ocasiones desbordan los presupuestos”.
Manifestó Santiago Jácome que “se debe intentar que la parte tributaria por los efectos de impuestos del 2022, que el precio del petróleo y las materias primas y otros ítems que aportan mucho el presupuesto, que evidentemente le sigan ayudando al Gobierno para que en el 2023 y en los próximos años el déficit fiscal tenga contracciones como posiblemente va a pasar en el 2022”.
Ingresos
Por otra parte, y con base en los datos oficiales, Fitch prevé entonces que el crecimiento del PIB nominal estimado está en un 17,5%, lo anterior al tiempo que los ingresos brutos crecieron casi un 19%, “mientras que el gasto estuvo en línea con el presupuesto, pero ascendió al 23,4% del PIB frente a la estimación presupuestaria del 24,8%, debido al fuerte crecimiento”, indica la calificadora.
Ahora, del lado de la deuda del Gobierno central en relación con el PIB cayó a 63,8% en 2021 desde 64,7 % en 2020, en gran parte debido al alto crecimiento del PIB nominal. “Si se replica al nivel general, el índice disminuiría a alrededor de 57,4%, en línea con la mediana de la calificación ‘BB’ y mejor que nuestro pronóstico de diciembre de un aumento a 59,5%”, agrega el análisis.
Con todo esto, Fitch advierte que el déficit de 2020 estuvo en línea con la mediana ‘BB’, “pero los déficits de 2021-2022 serían superiores al 5,2% estimado y las medianas previstas del 4%”.
Al igual que varios de los analistas que se han referido al Plan Financiero de Colombia, Fitch espera una mayor reducción del déficit en 2022, pero qué tanto baje también va a depender de cuánto gasto se mantenga para apoyar la economía, esto último a manos del nuevo gobierno.
“Las rigideces del gasto significan que podrían ser necesarias más medidas de ingresos para asegurar una reducción significativa de la deuda más allá de 2023 y para cumplir con los objetivos de saldo primario provisional en la regla fiscal actualizada. El aumento de las tasas internas y estadounidenses aumentará los costos del servicio de la deuda (casi el 40 % de la deuda está denominada en moneda extranjera)”, agrega Fitch.
Si bien para Fitch los precios más altos del petróleo y los ingresos por turismo podrían impulsar las exportaciones, habrá una caída del ingreso por concepto de remesas. Con esta previsión, el déficit en cuenta corriente caerá al 5% del PIB este año, desde un 5,6% estimado en 2021.
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Las elecciones
El punto al que vuelve Fitch es el desenlace de las elecciones, tanto en Congreso como en Presidencia.
Justamente sobre este punto, Fitch concluye diciendo que: “ningún candidato presidencial, incluido el actual favorito, el izquierdista Gustavo Petro, se postula con una plataforma antisistema. Parece probable que el Congreso permanezca fragmentado y en gran medida centrista, lo que requerirá la creación de consenso para aprobar la legislación. Un banco central independiente y un poder judicial autónomo proporcionarán controles y contrapesos”.
Por su parte, el ministro de Hacienda, José Manuel Restrepo, expuso en la presentación del Plan Financiero, que el compromiso del Gobierno nacional para lograr reducir el déficit fiscal presenta resultados positivos.
Dijo que el déficit fiscal de 2021 se habría ubicado en 7,1% del Producto Interno Bruto (PIB), como consecuencia del repunte extraordinario del recaudo tributario, gracias a que el gasto total se mantuvo prácticamente estable frente al Marco Fiscal de Mediano Plazo. “Así, el ajuste fiscal de 2021 frente a lo estimado en el Marco Fiscal (8,6% del PIB) ascendió a 1,6 puntos porcentuales del PIB, permitiendo que el déficit fiscal fuera inferior al nivel observado en 2020 (7,8% del PIB), iniciando de forma anticipada el proceso de consolidación fiscal”, ratificó.
También el gran desempeño fiscal observado en 2021 facilitó la reducción de la deuda del Gobierno Nacional Central, tres años antes de lo esperado en el Marco Fiscal de Mediano Plazo vigente, la cual disminuyó de 64,7% en 2020 a 63,8% del PIB (-0,9%).
El Plan Financiero
La buena marcha de la economía colombiana fue constatada durante el cierre fiscal preliminar de 2021 y la actualización del Plan Financiero 2022 del país, con el anuncio de la previsión de crecimiento de 9,7%, en 2021, y la proyección del 5% para este año.
El Ministro de Hacienda manifestó que estas cifras son el resultado de las medidas de reactivación económica adoptadas por el Gobierno nacional, y que se tomaron en medio de la peor crisis económica y social de la historia del país, por la pandemia del covid-19.
“Las menores restricciones de aforo, el avance en el plan de vacunación y las medidas implementadas por el Gobierno nacional para promover el proceso de reactivación económica han favorecido tanto el ritmo de crecimiento de la economía como la recuperación del mercado laboral”, dijo Restrepo.
La cifra prevista de 9,7% y de crecimiento de 5% para 2022, están por encima del 6% y 4,3%, respectivamente, proyectado en el denominado Marco Fiscal de Mediano Plazo para ambos años.
El Ministro ratificó que los motores de crecimiento estarían enfocados en sectores de la industria y la gran rama de comercio, así como en el dinamismo de la demanda interna. “Con estos resultados, Colombia se consolidaría como uno de los países líderes en materia de reactivación económica a nivel mundial, por encima de gran parte de las economías avanzadas y pares de la región”, agregó.