Sin parpadear, EE.UU mira y habla de Venezuela | El Nuevo Siglo
Foto Montaje El Nuevo Siglo
Viernes, 17 de Febrero de 2017
Redacción internacional con AFP

Desde que llegó Donald Trump al poder, Venezuela ha sido una de sus prioridades. Sólo en esta semana sancionó al vicepresidente, Tareck Al Aissami, por su presunto tráfico de drogas y pidió la liberación del opositor Leopoldo López, en un gesto que cayó muy mal en el chavismo, que un día después decidió ratificarle la condena a 14 años de prisión en la cárcel de Ramo Verde, a las afueras de Caracas.

Maduro, tratando de medir el pulso, ha respondido de forma airada a las decisiones tomadas desde Washington. "Si nos agreden, callados no nos vamos a quedar; Venezuela va a roncar y va a roncar duro (...) El imperialismo ha llegado a un nivel de desprestigio jamás visto", señaló en un acto de gobierno, en la primera vez que confronta a la administración Trump.

"El que se meta con nosotros recibirá la respuesta adecuada", añadió el mandatario, enfrentado en su país a una aguda crisis política y económica que minó su popularidad.

Casi simultáneamente, Trump lanzó un desafío al solicitar la excarcelación del opositor Leopoldo López tras reunirse en la Casa Blanca con la esposa de éste, Lilian Tintori, y con el senador republicano Marco Rubio, enemigo declarado del gobierno venezolano.

"Venezuela debería permitir que Leopoldo López, un preso político y esposo @liliantintori (a quién recién conocí con el senador @marcorubio) que salga de prisión inmediatamente", escribió Trump en Twitter, exhibiendo una foto junto a Tintori.

La canciller venezolana, Delcy Rodríguez, calificó a la audiencia concedida por Trump a Tintori como una "intromisión y agresión". Dijo que se trata de una muestra más de las “mafias de Miami”. 

"No quiero problemas con Trump"

Antes de que se conociera la demanda del presidente estadounidense, Maduro aclaró que no quiere "problemas con el señor Donald Trump", si bien aseguró que el "imperialismo está amenazándonos", en alusión a las sanciones impuestas el lunes por el Tesoro al vicepresidente Tareck El Aissami, a quien acusa de narcotráfico.

"Si me preguntan, ¿usted quiere pelear con el señor Donald Trump? No, lo digo claro, Venezuela quiere relaciones de respeto en términos de igualdad con la nueva administración", afirmó Maduro, quien empero dijo que al presidente norteamericano lo están "acorralando y empujando" a la "confrontación total".

Los dos países mantienen una relación conflictiva desde la llegada al poder del fallecido presidente Hugo Chávez (1999-2013), al punto que en 2010 retiraron a sus embajadores.

El pasado lunes, el Tesoro estadounidense incluyó al vicepresidente venezolano en una lista de personas y organizaciones sancionadas por sus vínculos con el narcotráfico.

Maduro rechazó el martes las sanciones y las calificó de "agresión", pero evitó confrontar con Trump, a quien hace casi un mes consideró víctima de una "campaña de odio" de medios internacionales.

¿Fin del compás de espera?

Maduro dio en esa oportunidad un compás de espera a su homólogo estadounidense para evaluar su política frente a Venezuela, advirtiendo que "peor que Obama no será". "El gobierno está jugando con cautela. Sabe que hay que tomar muy en serio lo que Trump dijo en su campaña", opinó el analista John Magdaleno.

Los movimientos de Trump frente a Venezuela significan que "el eje de la política bilateral va a seguir siendo la situación interna", dijo  a la AFP el internacionalista Carlos Romero. Resaltó que mientras Maduro mantiene la prudencia frente a Trump, se acercó a su aliado el presidente ruso, Vladimir Putin, en busca de "protección".

Lo hizo pensando en el escenario en que "Putin y Trump estuvieran negociando el momento geopolítico actual. Era como buscar un padrino, pero ahora Maduro tendrá que responder" por sus actos, estimó. Estados Unidos es el principal comprador del petróleo venezolano, prácticamente su único producto de exportación.

Tras advertir que Trump está siendo empujado al hoyo en que cayeron sus antecesores, Maduro le pidió no cometer los mismos errores. "Señor Donald Trump, abra los ojos, abra los oídos, no se deje llevar al terreno errático de equivocaciones y derrotas y repetir los mismos errores" de los expresidentes George W. Bush y Barack Obama, subrayó.

Maduro denunció que detrás de las presiones para enemistarlo con Trump están la oposición venezolana y factores de poder estadounidenses azuzados por la cadena de noticias CNN, cuya señal en español ordenó retirar en Venezuela.

"Presidente Trump, CNN y el Departamento de Estado le están imponiendo a usted una política equivocada hacia Venezuela, están promoviendo una invasión general masiva y una agresión contra Venezuela. CNN es un instrumento de guerra controlado por mafias", sostuvo.

Ratifican condena de López

La justicia venezolana ratificó en última instancia la condena de casi 14 años de prisión contra el dirigente Leopoldo López, símbolo de la oposición, después de que el presidente estadounidense Donald Trump pidiera su liberación.

La apelación fue presentada en julio pasado, y aunque la legislación preveía un corto tiempo de resolución, el fallo recién fue notificado este jueves, un día después de que la esposa de López, Lilian Tintori, fuera recibida por Trump en la Casa Blanca.

Para el analista Eugenio Martínez la decisión sobre el caso de López es una consecuencia de la reunión entre Tintori y el mandatario estadounidense. "Inclinó la balanza", aseveró a la AFP.

"No sólo se está ratificando la condena a un hombre inocente, que de por sí es grave, sino que destruye lo poco que queda de estado de derecho en Venezuela. No es un acto jurídico sino político", aseveró el abogado defensor.

"Ya agotamos todos los recursos que la legislación venezolana contempla. Vamos a acudir a (instancias de derechos humanos de) Naciones Unidas. En un par de semanas estaremos presentando el documento", agregó Gutiérez.