La mezcla de los diferentes estilos de la danza española se convirtieron en el ADN de las coreografías de Antonio Najarro, el director del ballet nacional de ese país que, precisamente por esa explosión de creatividad, armonía y belleza lo han catapultado en el escenario dancístico mundial y que será el encargado de abrir, hoy,  el Festival Iberoamericano de Teatro.

Zaguán y Alento, dos de las coreografías de Najarro que son el resultado de su trabajo en la recuperación del folclor y de los diferentes estilos de la danza española, son las obras que saltan a las tablas del Teatro Mayor Julio Mario Santo Domingo por cuatro días, para cinco funciones, hasta el domingo.

Zaguán es un ballet flamenco, en donde cada uno de los bailarines le pone su sello personal, acompañado de un vestuario elaborado con la mezcla de telas, puntillas, enrejados y materiales tradicionales combinados con nuevas técnicas de tintura y plisado de paños. El cual es diseñado para que cada uno de los bailadores brille en escena como un todo particular. Según Najarro,  “mi interés con este ballet  es que en el repertorio se cuente con un ballet flamenco actual pero que al mismo tiempo se perciba la tradición de este arte.”

Y agrega que  “me encanta influenciar y ver que la danza española evoluciona. Siempre he creído que para evolucionar es importante tener un buen conocimiento de las bases.” Es por ello  que la música de Jesús Torres hace referencia a la tradición del flamenco, mientras en escena se ven jóvenes artistas como Mercedes Ruiz, La Lupi y Marco Flores. Cabe resaltar que una de las grandes damas del flamenco, Blanca del Rey, participará con su coreografía “Soleá del Mantón”.

Esta primera parte va a contrastar con la segunda,  Alento, que es una coreografía original que trae el recuento de todo el trabajo del director. Najarro define su obra como: “un estilo que está absolutamente influenciado por todas las vertientes artísticas que nos rodean actualmente. Soy un gran consumidor de arte, me encanta la pintura, el cine, la moda, la música, las cuales se ven reflejadas en todas mis coreografías.”

El nombre de esta coreografía es la primera persona del verbo alentar en portugués, el cual quiere evocar un mensaje de futuro, alegría, libertad, buena vibra, fresco y positivo. Y ello lo logra a través de la danza y la música de Fernando Egozcue, quien ha creado una sinfonía rítmica y llena de sensibilidad, con influencias de jazz, blues y tango argentino. Najarro asegura, “lo primero que busco es que algo se remueva en el interior que la persona que lo está viendo, que el mensaje que nosotros lanzamos llegue al corazón del espectador.”

Toda esta puesta en escena irá acompañada de un vestuario actual, con cazadores de cuero, terciopelo, plumas, vestidos ceñidos, cinturones metálicos, todo muy de acuerdo con la moda ibérica, puntualizando con la danza estilizada española que toma protagonismo, con mucha castañuela y muchísima técnica en piruetas, saltos, zapateado y coordinación.

La estética es lo que más puede atraer al público joven que se sentiría  identificado con el vestuario que se presenta en esta coreografía. Najarro comentó que “en Alento, desde que se levanta el telón puedes ver 30 bailarines completamente vestidos a la moda. Cualquier joven que vea eso, en su cabeza puede imaginar perfectamente una noche especial en sus vidas, a la cual ir así. Y si a esto le sumas la música al estilo music hall. Son cosas que no esperas ver en un ballet nacional de España.”

Agrega, “estas llamadas de atención es lo que me ha llevado a crear este tipo de espectáculos, para abrir la imagen de la danza española y captar la atención de los más jóvenes.”

La compañía

Fundada en 1978, el Ballet Nacional de España, es la compañía pública de danza embajadora de la cultura española en el mundo. El bailarín, coreógrafo y director de este ballet manifiesta que ellos confeccionan sus espectáculos y escogen el que es más adecuado a presentar en un país de acuerdo a la influencia artística del mismo. Y, resalta, que “aquí en Colombia yo me siento con la libertad de que se tiene  el conocimiento de la tradición hispana y podemos ofrecer un plus, que es mostrar los nuevos lenguajes de la danza. Pero estoy abrumado de ver, a través de las redes sociales, la pasión con la que se vive la danza española aquí. Eso es lo que percibimos, desde hace tres años que visitamos Bogotá, sentíamos al público con nosotros de una manera muy especial y eso es de agradecer y hace que te sientas como en casa”

700 artistas en desfile inaugural

Una puesta en escena itinerante en homenaje el teatro colombiano es el protagonista del desfile inaugural, este sábado,  desde el mediodía de la edición 16 del Festival Iberoamericano de Teatro de Bogotá.

Organizado por la compañía Ensamblaje Teatro, a cargo del experimentado artista Misael Torres, quien ha puesto en escena cerca de 50 espectáculos para sala, calle y espacios no convencionales.  El Río de la memoria, como se ha bautizado el homenaje, abrazará a los amigos del teatro, en esta fiesta que acoge Bogotá.

Este año el Festival Iberoamericano de Teatro de Bogotá (FITB) cumple 30 años, el cual festejará con las 21 compañías nacionales e internacionales invitadas, junto con las muestras de circo, teatro familiar, comedia, danza, mimos y cantautores que conforman el teatro de calle.

Alrededor del Desfile, habrá fotografías que rinden homenaje a quince maestros del teatro colombiano y que están entre comparsa y comparsa.

A las 12 del día, antes de iniciar, los grupos realizarán un ritual de encuentro con las fuerzas expresivas y los elementos, en el Parque de los Periodistas, para consagrar el desfile a la memoria y a la ciudad.

A las 3:00 de la tarde se iniciará el Desfile, creado por más de 500 artistas del teatro, la danza y la música.

Los invitamos a ver, sentir y participar de este evento sumándose a la Comparsa Mayor, compuesta por los que quieran acompañar la fiesta del teatro. Los invitamos a conformar un río de gente, un río de vida, un río de imaginación, un río teatral.

El recorrido parte del Parque de los Periodistas, bajando por el Eje Ambiental hasta la Plaza de Bolívar, en el centro de la capital colombiana. Al finalizar, los cómplices del teatro conformarán La Comparsa Mayor, y, junto al público, se transformarán en un verdadero Río de gente.