¿Otra lucha antidroga? Candidatos opinan | El Nuevo Siglo
Foto ONU
Miércoles, 25 de Abril de 2018
Redacción Nacional
El presidente Juan Manuel Santos pidió en la Asamblea de la ONU que se deje atrás la guerra contra las drogas, porque conlleva más presos, más muertos, mafias más fuertes. Pero no todos los candidatos a sucederlo están de acuerdo

_______

 

"Hoy el narcotráfico sigue siendo la principal amenaza para la paz", advirtió en la sede de las Naciones Unidas el presidente Juan Manuel Santos durante la Reunión de Alto Nivel sobre Consolidación y Mantenimiento de la Paz.

"Si queremos proteger la paz de Colombia y de la región y del mundo, tenemos que cambiar la estrategia mundial para superar el problema de la drogas", implementada hace más de 40 años sin lograr resultados, afirmó el jefe de Estado en Nueva York.

Santos defendió "el principio de la corresponsabilidad" en la guerra antidrogas y sin mencionar a EU, primer consumidor mundial de estupefacientes, llamó a trabajar juntos "para reducir la demanda y para castigar a las organizaciones criminales trasnacionales".

De lo contrario, pronosticó "más presos, más muertos, mafias más fuertes". "Meter a consumidores o a campesinos en la cárcel no sirve", aseveró.

 

Alimento del conflicto

 

Al indicar que en Colombia el flagelo del narcotráfico ha alimentado el conflicto y éste ha dificultado combatir efectivamente al narcotráfico, consideró que por esta razón se incluyó en la agenda de negociación con las Farc el tema de las drogas ilícitas.

“Sin las Farc, se abre la oportunidad de resolver por primera vez de manera estructural el problema de la producción de la hoja de coca”, explicó.

Al respecto, el mandatario citó que ya se inició el programa de sustitución voluntaria y de erradicación forzosa de cultivos ilícitos, al tiempo que avanza “una lucha frontal contra los demás eslabones de la cadena, con resultados sin precedentes, por ejemplo en el volumen de droga incautada”.

A renglón seguido, el jefe de Estado recordó que, como lo dijo hace dos años en la Sesión Especial de la Asamblea General de la ONU, “la guerra que declaró el mundo aquí en Naciones Unidas contra las drogas hace más de 40 años, no se ha ganado”.

“La lucha por tomar control del negocio, que seguirá siendo tal mientras la demanda siga existiendo, genera muertos y más violencia en Colombia y en la región, como lo vivimos hace una semana en Ecuador”, adujo.

“Si queremos cambiar esa estela de muertes y destrucción social que nos ha dejado el narcotráfico, si queremos proteger la paz de Colombia, de la región y del mundo, tenemos que cambiar la estrategia mundial para superar el problema de las drogas”, sostuvo.

Para concluir este tema de su intervención ante la ONU, el jefe de Estado reiteró su llamado urgente al mundo “para que abramos los ojos”, y expuso que tenemos que reconocer que “si seguimos haciendo lo mismo, seguiremos teniendo los mismos resultados: más presos, más muertos, mafias más fuertes”.

 

“Meter a los consumidores o a los campesinos a la cárcel no sirve. Cambiemos el enfoque. Bajo el principio de corresponsabilidad, trabajemos juntos para reducir la demanda y para castigar las organizaciones criminales trasnacionales que se lucran del negocio y siembran dolor y muerte a su paso”, concluyó.

 

¿De acuerdo?

 

Pero, ¿qué dicen los candidatos a suceder a Santos en el ‘solio de Bolívar’?

La política integral contra las drogas del candidato Iván Duque consiste en reactivar las brigadas de erradicación móvil de cultivos ilícitos, combinada con la aspersión aérea.

“Vamos a apelar a la erradicación genética. Hay que conocer bien la genética de ese cultivo para fortalecer la destrucción del mismo. Desmantelar los laboratorios que hay en el país. Y actuar con toda la capacidad que tiene la Fuerza Pública”, ha dicho Duque, agregando que “el microtráfico está consumiendo a muchos municipios de Colombia, y lo está haciendo porque ha habido laxitud. A los adictos no los podemos tratar como criminales, porque ellos ya están en una enfermedad, y en una enfermedad que necesita colaboración”.

Por su parte, Gustavo Petro dice sobre la política de droga que el consumidor al ser tratado como delincuente se le deja expósito a las mafias.

“Por este camino, sectores de la juventud urbana se articulan a las economías ilegales y asciende la violencia. Un consumidor de drogas simplemente debe ser tratado personalmente por el médico”, ha expresado.

“Disminuir la producción de coca tiene que plantear un nuevo modelo económico: los campesinos deben estar en tierras fértiles y deben ser copropietarios del negocio. Y los campesinos que persistan en la coca, les planteamos que venda la hoja de coca, pero para usos medicinales”, declaró en su momento.

Germán Vargas Lleras considera que el plan de erradicación voluntaria ha sido un fracaso, excepto muy honrosas excepciones en municipios como El Dovio, en el Valle y “es ahí donde debemos actuar y evitar que esta problemática siga creciendo”.

Ha planteado que el concepto de que la dosis personal es la que “la persona necesite, como lo corroboró la Corte Suprema hace apenas algunas semanas, podría derivar en la comisión de delitos”.

 

“Lamento que la Corte le haya dado ese alcance a la dosis mínima. Eso se está prestando a la más grande impunidad. El aprovisionamiento ha dado lugar a que cualquier consumidor se convierta en narcotraficante, en dispensador sin que las autoridades puedan actuar”, ha manifestado Vargas Lleras.

 

Humberto de La Calle persistirá en el programa de sustitución de cultivos ilícitos, aunque aclarando de no caer “en la ligereza de decir que con aspersiones se acaba la coca después de 30 años de lucha. Soy partidario de la erradicación forzada manual, cuando haya resistencia de las comunidades, pero no metiendo a la cárcel a los campesinos cultivadores. La sustitución es costosa, pero vale la pena, me opongo a la sustitución con glifosato”.

Sobre este tema, Sergio Fajardo ha expuesto que “queremos que lluevan oportunidades sin glifosato. Tenemos que entender que en el territorio hay que construir un plan educativo, diseñar un proyecto de ciencia que les permita a las personas que hoy siembran coca, sembrar otros productos de la mejor manera. Todo eso con planes donde la plata no quede en intermediarios”.