La región de Madrid, epicentro de la epidemia del nuevo coronavirus en España, anunció este viernez la extensión a nuevas zonas de las restricciones de movilidad, una decisión insuficiente para el gobierno central, que pide aplicarlas en toda la capital.
En rueda de prensa el viceconsejero regional de salud, Antonio Zapatero, informó que a partir del lunes unos 167.000 madrileños adicionales podrán salir de sus vecindarios solamente para trabajar, ir al médico o llevar a los niños al colegio, pero aconsejó permanecer en casa a aquellos que puedan hacerlo.
Más de 850.000 residentes de diversas zonas, entre ellas varios barrios humildes del sur de la ciudad, ya debían respetar estas restricciones desde el lunes pasado.
En señal clara de desacuerdo, el ministro español de Sanidad, Salvador Illa, convocó de manera sorpresiva una rueda de prensa paralela en la que criticó el "gradualismo" de Madrid y pidió "determinación" para lograr frenar la progresión galopante de infecciones en la capital, epicentro de la epidemia de covid-19 en el país.
En una reunión previa con las autoridades madrileñas, el gobierno central propuso extender las medidas "a toda la ciudad de Madrid", de más de 3 millones de habitantes, y a otros municipios con alta incidencia del virus, explicó Illa.
En España, Madrid y las otras 16 comunidades autónomas son las únicas competentes en materia de salud, sin que el gobierno central pueda imponer sus decisiones.
A mediados de marzo, el gobierno debió decretar un estado de alarma, un régimen de excepción que le permitió centralizar las decisiones sanitarias e imponer un severo confinamiento a todos los españoles, que solo pudieron salir de sus casas por causas de fuerza mayor.
Para hacer frente a la actual situación, el gobierno ofreció a Madrid miles de soldados para reforzar las labores de rastreo de posibles contagios y desinfección de infraestructura, esta última una labor que ya hicieron en todo el país durante la primera ola.
A diferencia del confinamiento entre marzo y junio pasados, las personas con restricciones en Madrid pueden desplazarse por sus vecindarios, aunque los parques públicos permanecen cerrados y los restaurantes y bares tienen horarios y aforos restringidos.
El jueves, el Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades (ECDC) manifestó su "gran preocupación" por la evolución de la pandemia en siete países de la región, entre ellos España.
Según cifras oficiales, más de un cuarto de las camas en los hospitales de la región y cerca del 40% de las plazas de cuidados intensivos están ocupados por pacientes de covid-19. Pero algunos centros parecen desbordados.
Un sindicato de médicos de la salud pública llamó a una huelga a partir del lunes para exigir más medios.