Fallece el emir de Kuwait a los 91 años, tras tratamiento médico | El Nuevo Siglo
Foto AFP
Martes, 29 de Septiembre de 2020
Agence France Presse

El emir de Kuwait, jeque Sabah al-Ahmad al-Sabah, murió este martes a los 91 años, anunció el palacio real de este pequeño país del Golfo.

"Con gran tristeza y dolor lloramos (...) la muerte del jeque Sabah al-Ahmad al-Sabah", declaró el jeque Ali Jarrah al-Sabah, ministro a cargo de los asuntos reales en una grabación difundida por televisión.

La televisión kuwaití interrumpió su programación y transmitió versículos del Corán incluso antes del anuncio oficial. 

Tras su hospitalización en Kuwait, el pasado 18 de julio, el jefe de Estado, que llegó al gobierno en 2006, delegó "temporalmente" parte de sus poderes en el príncipe heredero, el jeque Nauaf Al-Ahmad Al-Jaber Al-Sabah. Este último, su medio hermano, de 83 años, lo sucederá. 

El emir viajó a Estados Unidos a fines de julio para continuar allí su tratamiento médico, según las autoridades, que no dieron ningún detalle sobre la naturaleza de su enfermedad. 

No quedó claro en lo inmediato si el emir aún se encontraba en Estados Unidos en el momento de su muerte o si había vuelto a su país. 

En 2002 le fue extirpado el apéndice y antes, en febrero de 2000 le habían colocado un marcapasos cardíaco. En 2007, fue sometido a una cirugía de las vías urinarias en Estados Unidos. 

En septiembre de 2019, el emir se había sometido a exámenes médicos tras llegar a Estados Unidos, lo que provocó la postergación y luego la anulación de una reunión con el presidente estadounidense, Donald Trump.

El jeque Sabah era considerado el artífice de la política exterior del Kuwait moderno, al ser un gran aliado de Estados Unidos y Arabia Saudita, en tanto mantenía buenas relaciones con el archirrival de este último, Irán. 

Su hospitalización en julio precedió a la del rey Salmán de Arabia Saudita, de 84 años, quien abandono el nosocomio tras pasar allí 10 días, durante los cuales le extirparon la vesícula biliar. 

Había ocupado varios cargos importantes en el gobierno de su país, y fue designado príncipe heredero en 2006, por consenso de la familia gobernante que lo eligió para el cargo a causa de su popularidad en el seno de la misma.