¿Se subestima de nuevo fuerza electoral de Trump? | El Nuevo Siglo
Aunque Biden lidera las encuestas de voto nacional, esos mismos sondeos reflejan que la mayoría de estadounidenses cree que Trump ganará las elecciones.
Foto AFP
Viernes, 2 de Octubre de 2020
Redacción internacional

A  menos de un mes  de la elección presidencial en los Estados Unidos, el candidato demócrata Joe Biden lidera las encuestas de voto nacional; sin embargo, esos mismos sondeos reflejan que la mayoría de estadounidenses creen que el presidente, Donald Trump, ganará las elecciones.

Incluso puede pensarse que el hecho de haber contraído el covid-19, aunque puede privarlo de escenarios en los que consigue enormes réditos políticos, le permitirá también ganar popularidad en las encuestas como ya ha ocurrido con los mandatarios que han padecido la enfermedad.

La percepción de que Trump ganará las elecciones coincide además con el hecho de que la diferencia entre uno y otro se sigue reduciendo en Estados clave que definirán la elección y en los que ya se encuentran en empate técnico.

La encuesta de la Universidad de Monmouth, publicada esta semana, también sugiere que la mayoría de los electores creen que hay “votantes secretos” de Trump en sus comunidades que mantienen sus preferencias para sí mismos y no las revelan en los sondeos. Según la encuesta, el exvicepresidente supera a Trump por 7 puntos (con un 3,6% de margen de error), mientras que en el promedio de todas las últimas encuestas nacionales en la carrera por la Casa Blanca que fue compilado por Real Clear Politics se indica que Biden aventaja al presidente por 7,5%.

El mismo promedio de las encuestas nacionales de Real Clear Politics en esa fecha, hace cuatro años, mostró que la candidata presidencial demócrata de 2016, Hillary Clinton, estaba por delante de Trump por 2,7 puntos. E incluso, Clinton superó a Trump por 3,2 puntos en vísperas de las elecciones generales.

Como es sabido Clinton terminó ganando el voto popular nacional en un 2%, pero Trump superó a Clinton en muchos de los Estados clave, lo que lo ayudó a vencerla en el importantísimo recuento del Colegio Electoral para ganar la Casa Blanca.

Por otra parte, la encuesta de Monmouth indica que aproximadamente 6 de cada 10 votantes confían en que las elecciones de noviembre se llevarán a cabo de manera justa y precisa, mientras que un nada despreciable 37% desconfían del mecanismo y les preocupa que se preste para realizar fraudes.

La encuesta indica que más partidarios de Biden -que los de Trump- confían en la imparcialidad y precisión de las elecciones.

Sin embargo, el hallazgo más llamativo del sondeo es que el 48%, frente a un 43% que discrepan, piensan que Trump ganará las elecciones presidenciales en lugar de Biden.

Esto se debe a que el 55% de los encuestados dijeron que creen que hay votantes que respaldan a Trump sin manifestarlo abiertamente a las encuestas, mientras que tan solo el 30% considera que el mismo fenómeno puede ocurrir con Biden.

Esta evidencia haría pensar que mientras que Biden ya ha tocado su techo, Trump tiene algunos puntos por sumar en la elección y considerando que en varios Estados pendulares se encuentran en empate técnico, serán clave para inclinar la balanza a favor del Mandatario.

Estrategias de campaña

La táctica de Biden para vencer al presidente consiste en recordar insistentemente, los que considera puntos débiles de la Administración, es por eso que el exvicepresidente afirmó que "evidentemente no se podía confiar en Trump para manejar el coronavirus”. A lo que el presidente Trump ha respondido diciendo que “no se podía confiar en que Biden mantuviera a los estadounidenses a salvo de crímenes violentos y que su propuesta de mantener el confinamiento hasta que la pandemia no se haya controlado por completo destruiría la economía y al país”.

Sin lugar a dudas estos dos temas, crisis sanitaria y recuperación económica, son la mayor preocupación para los votantes el 3 de noviembre y podrían determinar quién ganará las elecciones.

Es por esta razón que distribuir una vacuna contra el covid-19 antes de las elecciones es tan importante para Trump, y Biden ha intentado hacer declaraciones que lo muestren un poco más rígido y defensor de la ley y el orden pero sin llegar a molestar a sus aliados del ala izquierdista radical de su parido encabezada por Bernie Sanders.

Para el jefe de la oficina de ABC en Washington, David Lipson, Trump cuenta con una ventaja que usará en lo que resta de campaña y que lo pueden mantener en la Casa Blanca.

El Presidente es un maestro en el control de la narrativa de los medios y a pesar de que su situación actual le impedirá hacer grandes manifestaciones públicas o batirse con su rival, encontrará la manera de sacar provecho a su situación y ganar el favor del electorado.

Biden no tiene esa habilidad y muchos espectadores lo perciben como una persona apática y lejana que no consiguió el impulso electoral que se esperaba con la nominación como fórmula vicepresidencial de Kamala Harris, al punto de que tras su convención su posición no varió en nada en las encuestas, al contrario de Trump que, tras la suya, aumentó entre 2 y 3 puntos su intención de voto.

Economía

No cabe duda de que la principal fortaleza de Trump es su manejo de la economía. El mandatario pretendía que las sólidas finanzas estadounidenses fueran la base de su campaña de reelección y aunque el coronavirus hizo trizas su planes, el Presidente ha logrado demostrar ganancias constantes en los últimos meses, mientras que hace campaña asegurando que es él quien “puede reconstruir esa economía nuevamente".

La economía es una de las medidas en las que la mayoría de los votantes califica positivamente a Trump. Si bien, los máximos de principios de 2020 siguen siendo un recuerdo lejano, la economía ya muestra una recuperación constante y sostenida. Y eso refuerza las posibilidades de reelección del Presidente.

En pleno confinamiento, el Mandatario logró un aumento en los ingresos personales del 0,4% (mejorando desde una caída del 1,1% a mediados de año) ofreció noticias positivas en el frente del desempleo que se redujo en 2,8 millones. La Oficina de Estadísticas Laborales señaló que era el cuarto mes consecutivo en que la tasa de desempleo y la creación de puestos de trabajo habían mejorado, aunque siguen siendo más desfavorables que en febrero.

Analistas reconocen que las encuestas nacionales desconocen la realidad de los colegios electorales y que las que se realizan en los estados podrían estar desviadas de manera sistemática, como sucedió en 2016, cuando subestimaron el apoyo de la clase trabajadora a Trump.

Así las cosas, las habilidades discursivas de Trump, sus excelentes resultados económicos y la posibilidad de tener a una jueza en la Corte Suprema de Justicia muy pronto, pueden hacer que influya en votantes indecisos o inconformes.

Este contexto hace pensar que, a pesar del contagio del presidente por coronavirus, sus acciones y habilidades hacen posible que Trump repita los resultados del 2016 y que aunque pierda el voto popular, gane en los Estados en los que lidera o va muy poco por debajo y consiga los votos electorales necesarios para su reelección.