Los agradecimientos a los Beatles han sido, durante mucho tiempo, un elemento básico en la música popular y su influencia ha permeado toda nuestra cultura, en libros, películas y en la vida cotidiana en general. Pero, ¿cómo recordamos exactamente a John Lennon? En los últimos años, el legado de este venerado ícono, se ha vuelto más complicado y problemático. Estas fechas presentan múltiples oportunidades para evaluar su vida y obra, considerando que ayer habría sido su 80 cumpleaños, fecha que tiene un trágico aniversario gemelo pues a sólo dos meses de distancia, el 8 de diciembre se cumplirán cuarenta años desde su asesinato.
Las fechas están siendo conmemoradas por una serie de nuevos proyectos: una nueva caja llamada Gimme Some Truth, The Ultimate Mixes, en la que 36 de sus canciones más conocidas han sido completamente remezcladas desde cero; un especial de radio de la BBC presentado por su hijo Sean y un documental de televisión de la misma cadena que está por salir. Asimismo álbumes y espectáculos de tributo y varios libros, se venden como “pan caliente” y donde tienen especial interés aquellos que se centran en sus últimos años de vida. Sin embargo, parece que en los últimos años, la posición de Lennon en la estratosfera del rock ha comenzado a decaer.
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Paul McCartney continúa de gira, heroica e incansablemente, todavía llenando estadios y emocionando a múltiples generaciones (hasta que la pandemia los detuvo) y haciendo nueva música muy bien recibida por el público. Incluso hay rumores de que un álbum grabado durante el confinamiento se lanzará a finales de año.
Mientras tanto, el recuerdo de la espiritualidad mística de George Harrison lo ha catapultado como el Beatle favorito entre la comunidad hípster y su canción "Here Comes the Sun" es de lejos la más reproducida de la banda en Spotify.
De hecho una encuesta realizada recientemente por el programa de radio SiriusXM publicó una encuesta realizada por Twitter en la que se indagaba cuál era el Beatle favorito de los oyentes e increíblemente Paul y George eran líderes codo a codo mientas que John era tercero a una buena distancia. Ringo Starr, eternamente amado, pero a la vez subestimado, recogió a su habitual puñado de seguidores.
Pese a lo anterior el tiempo empieza a cobrar popularidad a la banda. Prueba de ello es que en la lista publicada recientemente por la revista Rolling Stone de los "500 mejores álbumes de todos los tiempos", en la que se amplió enormemente el número y la amplitud de votantes desde la última vez que publicaron el ranking en 2012, los Beatles pasaron de tener 4 álbumes en el top 10 y en esta ocasión sólo tuvieron uno, solo Abbey Road, que se ha convertido en la opción preferida para los oyentes de la Generación Z, y se ubicó en la posición número 7.
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Aunque las grabaciones en solitario de Lennon, todavía se encuentran entre las más altas de los catálogos de los Beatles, también cayeron dramáticamente en el ranking mencionado. Plastic Ono Band cayó de la posición 23 a la 85, e Imagine de la 80 hasta la 223.
Así las cosas vale preguntar ¿por qué John Lennon, durante décadas una de las figuras más queridas del mundo, parece estar bajo un mayor escrutinio y recibir una mirada más crítica de las generaciones más jóvenes?
Críticas
Como se recordará en los últimos años de su vida Lennon habló abiertamente sobre ser un esposo y padre negligente e incluso abusivo. “solía ser cruel con mi esposa, la golpeaba y la mantenía alejada de las cosas que amaba”, cantó en “Getting Better”, canción que reconoció hablaba de su propia vida. Aunque el artista se disculpó y aseguró que había cambiado, ciertamente se ve que en un mundo posterior al #MeToo su comportamiento no ha sido excusado, también se ha exaltado recientemente su fama de bravucón y buscapleitos.
Pero la ironía es que, no importa cuán correctamente críticos seamos con él hoy, la influencia de Lennon sigue siendo una presencia poderosa en la cultura y la música pop. Entre sus mayores contribuciones (además de ser uno de los más grandes cantantes de rock, a pesar de odiar siempre el sonido de su propia voz) estuvo su salto a la composición personal y confesional.
Después de la primera ola de Beatlemanía, Lennon recurrió a un nuevo tipo de autorreflexión en sus letras, con canciones como "Help!" y "In My Life" y "Nowhere Man". Las canciones pop obviamente habían abordado durante mucho tiempo la angustia, pero nadie había escrito antes sobre el aislamiento, el miedo y la incertidumbre en términos tan directos en un disco.
"Nunca me ha gustado escribir canciones en tercera persona", dijo una vez. “La mayoría de mis mejores canciones están en primera persona. Me gusta escribir sobre mí". En otra parte, dijo que “no sé exactamente cuándo comenzó, como 'I'm A Loser' o 'Hide Your Love Away', o ese tipo de cosas. En lugar de proyectarme en una situación, solo intentaría expresar lo que sentía por mí mismo".
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Legado
Según un estudio de la Universidad de California, el pop en 2020 se ha convertido en un descendiente directo de este impulso. Las canciones simples y optimistas están siendo reemplazadas constantemente por algo más serio e introspectivo. Hoy los ídolos adolescentes escriben y cantan cada vez más sobre la salud mental y emocional, la ansiedad y la pérdida. El estudio afirma que las expresiones de tristeza van en aumento en la música actual, mientras que la investigación del sitio web Quartz confirma que el uso de las palabras "depresión" y "ansiedad” están cada vez más presentes en las letras de los éxitos del momento.
Ciertamente la figura de Lennon no es indiferente para nadie, amado por unos y odiado por otros (en su mayoría McCartneistas que lo culpan de haber destruido la banda por su relación con la artista conceptual Yoko Ono) no cabe duda que su influencia en la cultura actual es notable y sea esta la oportunidad para reconocer su legado y hacer un llamado a no caer en anacronismos que pueden restarle el destacado lugar en la historia que merece.