La determinación de la jueza 30 de garantías, las posturas de la Fiscalía y del Ministerio Público, le da tranquilidad al país de que las instituciones han actuado como un todo armónico, consideró el exfiscal Néstor Humberto Martínez.
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EL NUEVO SIGLO: ¿Cómo vio la audiencia contra el expresidente Álvaro Uribe?
NÉSTOR HUMBERTO MARTÍNEZ: Lo que ocurrió en la audiencia demuestra la fortaleza de nuestro Estado de derecho en medio de un tema que ha suscitado una gran controversia política. Tanto la Corte como la Fiscalía y el Ministerio Público estuvieron de acuerdo con que había que aplicar la Ley 906, lo cual es inobjetable y así lo dispuso la jueza de garantías, me parece que le ha dado tranquilidad al país el hecho de que las instituciones hayan obrado en un todo armónicamente.
ENS: ¿Causa sorpresa la autoincriminación de las Farc en el magnicidio de Álvaro Gómez?
NHM: Causa sorpresa realmente la información de las Farc, pero si el procesos de paz debe llevar a conocer lo que ocurrió en el conflicto armado debemos tener las mentes abiertas para conocer lo ocurrido. Lo que sí es extraordinario es esta confesión en la medida en que los expedientes judiciales de la Fiscalía no mantenían ninguna línea de investigación con base en los elementos materiales probatorios que apuntara a las Farc, por lo tanto la prueba que tiene hoy la justicia es que se acredite cabalmente la autoría del crimen por parte de las Farc y que ojalá esto no constituya una coartada de ningún tipo.
ENS: En realidad, ¿fue fructífero el proceso de paz con las Farc para Colombia?
NHM: Por supuesto que el proceso de paz con las Farc tenía el propósito de consolidar la reconciliación nacional. Desafortunadamente, el Estado ha sido inferior a ese propósito en la medida en que no cooptaron los territorios de consolidación, se desplegaron los cultivos ilícitos consolidando las actividades criminales en esos territorios y los carteles mexicanos llegaron al país para quedarse. Todo esto lo denunciamos en su momento, pero por otra parte las Farc no cumplieron con la entrega de los bienes y están en deuda con la Justicia Especial para la Paz frente al reconocimiento de los delitos de lesa humanidad y los crímenes de guerra.
ENS: ¿Cómo ha visto las protestas y el fallo donde prohíben que se utilicen armas por parte de la Policía?
NHM: Por supuesto que los ciudadanos tienen derecho a expresarse civilizadamente y sin violencia, pero sin afectar los derechos colectivos de la mayoría, el derecho a la libertad de desplazarse, de la libre movilización, el derecho a impedir el vandalismo que afecta la propiedad privada, los bienes públicos. Colombia no puede, y esta es una discusión que se está dando en otros países, entregar el principio de autoridad para que minorías organizadas que practican la anarquía causen estragos en la vida social.
ENS: ¿Se requiere hoy más que nunca la reforma a la Justicia?
NHM: Por supuesto que la reforma a la Justicia será siempre un propósito colectivo, pero no es la reforma de las grandes corporaciones judiciales, de las funciones electorales de las cortes que no le dicen nada al ciudadano. La gran reforma que necesita el país es la de permitir el acceso real y efectivo a la justicia en los territorios, en las zonas donde hubo conflicto armado y donde la insurgencia y otros grupos irregulares ejercían de facto el poder del Estado allí hay una gran vacío que esta por cubrirse en la sociedad colombiana.