¿Qué lecciones dejaron debates sobre la reactivación económica de Bogotá? | El Nuevo Siglo
En la comisión de Hacienda se adelantaron ambos proyectos en extensa discusión
Foto El Nuevo Siglo/Diana Rubiano
Domingo, 25 de Octubre de 2020
Redacción Bogotá

El pasado 13 de agosto, la Alcaldesa Mayor de Bogotá, Claudia López, socializó la hoja de ruta que seguiría Bogotá para su recuperación económica. Se trataba de dos proyectos: un cupo  de endeudamiento por $10,79 billones, y un plan de reactivación económica.



Aunque en aquel entonces la alcaldesa solicitó al Concejo que ambas ponencias se tramitaran con urgencia manifiesta, el miércoles 9 de septiembre, día en el que se acabaron las sesiones ordinarias, no se aprobó ninguno de los proyectos y ambos tuvieron que ser presentados nuevamente.

Han pasado poco más de dos meses desde que la Administración radicó este paquete, y ambos proyectos ya están a punto de terminar su trámite en el Concejo (el plan de reactivación económica fue aprobado en Hacienda y en Plenaria, y al Cupo solo le falta la discusión en plenaria, que en principio debe comenzar hoy).

Dicho esto, y tras seis días completos de deliberación en la comisión de Hacienda, ¿qué lecciones dejaron estos debates? Pues bien, EL NUEVO SIGO habló con varios concejales y tres hechos son claros: el plan de reactivación tuvo varios peros “pero algo es mejor que nada”; el papel de la oposición fue cuestionado por algunos; y el debate largo y riguroso de ambos proyectos era necesario.

Algunos alivios 

En el primer debate relacionado con los impuestos, una discusión clave era si este era un proyecto de reactivación económica o si por el contrario era, como varios concejales lo manifestaron en sus intervenciones, una reforma tributaria.



A este respecto, la concejal de Colombia Humana, Susana Muhamad y quien en calidad de presidenta de la Comisión de Hacienda presidió los 6 días completos de deliberación, le dijo a este diario que, si bien este primer proyecto contempla algunos alivios, “el debate dejó claro que este no era un proyecto de reactivación económica, sino una estrategia para recaudar impuestos, y yo creo que esa fue una conclusión del debate multipartidista”.

Explicando entonces que este primer proyecto tuvo un debate democrático muy interesante desde todas las posiciones, y que de hecho dichas posiciones ideológicas y políticas fueron bastante claras, “se pudo llegar a unas concertaciones, eso si, sin lograr que la Administración ampliara su perspectiva frente a la trasferencia de empleo o de recursos. La conclusión general de todos los sectores fue: “es mejor algunos alivios que ningún alivio”, pero no es lo que se necesita y no es suficiente”, reiteró la cabildante.

Las  votaciones

Ahora bien, con relación al cupo de endeudamiento, de acuerdo con la concejal Muhamad todas las bancadas estuvieron de acuerdo en que el endeudamiento público era una respuesta necesaria y pertinente a la crisis, y la discusión versó más hacia el monto del mismo y para qué.

No obstante, la concejal refirió que “la discusión democrática no llevó al efecto de la votación. Por ejemplo, en el primer debate el Centro Democrático votó negativo el artículo que subía el ICA a los cuatro sectores, pero en el cupo eso no pasó”.



En este aspecto coincidió el concejal cabeza de lista de la Alianza Verde, Diego Cancino, quien se refirió a una contradicción entre el discurso y la votación nominal de los  concejales de oposición.

“Yo no entiendo porque se oponen a los dos proyectos y la votación es diferente. Los artículos los votaron a favor y yo sí me pregunto si este es un capricho de oponerse por oponerse en donde dicen que no, votan que si y las justificaciones no son suficientes para justificar ese voto”, le dijo a EL NUEVO SIGLO el concejal Cancino.

Adicionalmente, la concejal Muhamad, quien dijo que en el Concejo “no hay una oposición real”, también se refirió a la coyuntura de la elección de personero y contralor.

“Obviamente ahí hubo una negociación política y recuerda que ahorita en noviembre viene la elección de personero y contralor. Con esto solo estoy enumerando los hechos. No estoy afirmando que aprobaron el cupo a cambio de un acuerdo de esos, no lo se. Solo estoy relatando una secuencia de hechos”, finalizó diciendo la concejal Muhamad.

El votó de la oposición fue coherencia

En la contraparte del argumento, el concejal Yefer Vega le explicó a EL NUEVO SIGLO que los votos de los miembros de Cambio Radical en la comisión de Hacienda fueron coherentes y responsables, en la medida que se generaron las herramientas necesarias para el restablecimiento de la economía en Bogotá.

“Si nosotros quisiéramos oponernos por oponernos, pues sencillamente estaríamos en el mismo juego cochino en el que estuvo el Polo con la Administración de Enrique Peñalosa. Les estamos dando una lección de altura”, finalizó diciendo Vega.

En el mismo sentido, el concejal del Centro Democrático, Humberto Amín, explicó que su voto a favor de mantener el monto total del cupo se debió a dos factores: su voto a favor del corredor verde en el Plan de Desarrollo; y el segundo, que no necesariamente se gastará todo este cupo.

“Para que se pueda reactivar la ciudad le estamos dando a la Administración un cupo hasta por cierto monto para que pueda ejecutar sus proyectos. La Alcaldía expresó que si se aprobaban solo $8,6 billones se quedaría por fuera el Corredor Verde por la Carrera Séptima  y actuando coherentemente, yo en el PDD apoyé esa iniciativa porque no estoy de acuerdo con Transmilenio por la Séptima. La alcaldesa ha incumplido algunas promesas pero le estamos dando las garantías para que tenga las herramientas de cumplirle a los bogotanos y para que después no diga que la oposición no la dejo actuar”, explicó  el concejal Amín.

A este respecto, el cabildante del Centro Democrático, Andrés Forero, indicó que en el cupo fueron pocos los concejales que mantuvieron las críticas “y yo particularmente, hablo en nombre propio, estoy en contra de ese monto y en plenaria lo votaré en contra”, argumentó Forero, quien explicó que puede haber voces divergentes al interior de una misma colectividad, y en eso consiste la democracia.

Unos tiempos necesarios

Recordando que el primer cupo de endeudamiento radicado no progresó, ya que la sesión se tuvo que cancelar a raíz de la recusación que presentó la bancada de Cambio Radical contra tres concejales del Polo por temas del Metro de Bogotá, es conclusión de varios concejales que gracias a eso este proyecto tuvo el trámite riguroso y juicioso que correspondía.



“Estos son dos instrumentos fundamentales para pensar en la reactivación de la economía y los tiempos no daban. La Administración quería aprobar estos proyectos a pupitrazo y en un día y eso no se podía hacer por la naturaleza misma de los proyectos”, dijo el concejal Vega.

La concejal Muhamad, a este respecto, dijo que lo que pretendía inicialmente la Administración, “era imposible, era una irresponsabilidad y ellos querían que fuéramos unos notarios”. Así mismo, el concejal Cancino también indicó que las dos transformaciones que sufrieron estos proyectos fueron resultado de una deliberación juiciosa, y “haber aplazado la discusión, por la circunstancia que fuera, fue fundamental para la democracia”.  

Por último, a este respecto el concejal Forero refirió que, “quienes planteábamos que era un despropósito discutir, tramitar y evacuar de la comisión de Hacienda ambos proyectos a las carreras y a pupitrazo teníamos razón. En buena hora, por lo que sucedió con Cambio Radical y el Polo, estos proyectos tuvieron un trámite bastante más enriquecedor”, añadió Forero.