Germán Vargas Lleras reiteró que derrotará las encuestas. Iván Duque le responde a Claudia López. Gustavo Petro dice que no tiene agendas ocultas. Humberto de la Calle dice que respeta las encuestas.

A escasos días de la primera vuelta presidencial los aspirantes le subieron el tono a sus pronunciamientos.

Desde los estudios de Caracol Radio, Germán Vargas Lleras se declaró sorprendido de que “Gustavo Petro esté hablando de fraude. Hace tres meses andaba con el cuento de que lo iban a poner preso. Hace un mes y medio que lo iban a matar. Y ahora que le van a robar las elecciones. Está anticipando su derrota”.

Dijo que el Gobierno debe reforzar la seguridad el día de las elecciones para evitar las asonadas y las aglomeraciones que está convocando el candidato de Colombia Humana.

“Nosotros somos los que estamos preocupados”, aseguró: “No olvide que los profesores, que en su inmensa mayoría militan en el petrismo, son los jurados de votación. Yo sí creo que puede haber alguna manipulación y por eso cualquier precaución es poca”.

“En la Plaza de Bolívar le dimos un entierro a las encuestas. Yo creo que muchas de ellas están totalmente equivocadas. Veo un ‘votofinish’ con Gustavo Petro y a Iván Duque no lo veo tan alto como dicen las encuestas”, expresó.

Frente a la propuesta de dejar una sola corte manifestó que “no me gusta la idea de unificar las cortes, como lo ha propuesto Iván Duque. Nosotros estamos hablando de fortalecer la Rama Judicial, de hacerla más eficiente y cercana a la gente, crear la Jurisdicción de Extinción de Dominio y la Jurisdicción Comercial”.

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Duque pide no hacer triquiñuelas

Una nueva polémica estalló por cuenta de una declaración de la senadora Claudia López, fórmula vicepresidencial de Sergio Fajardo, en la que asegura que ojalá el próximo domingo “se le embolate la cédula a la tía uribista”.

El primero en protestar fue el senador Álvaro Uribe, líder natural del Centro Democrático, quien publicó ese video y escribió en forma sarcástica: “Fórmula de ‘transparencia’ electoral de la candidata Claudia López: embolaten la cédula de la tía uribista”.

El candidato uribista Duque también desestimó las declaraciones: “Yo lo que quiero es que este país tenga democracia. No la limitemos. No invitemos a hacer trampitas ni triquiñuelas. Dejemos que los colombianos analicen bien las propuestas de los candidatos y que todos salgan a las urnas a expresarse libremente”.

Igualmente Duque reaccionó a la polémica que desató en la opinión pública una publicación del exconvicto jefe de sicarios John Jairo Velásquez, alias Popeye, quien incitó a la violencia contra los seguidores del aspirante de Colombia Humana, Gustavo Petro.

“No respaldo ninguna expresión de violencia. He venido haciendo una campaña decente, de ideas, de propuestas, motivando a los colombianos. Rechazo cualquier incitación a la violencia de cualquier persona, y mucho más de cualquier persona que esté haciendo pronunciamientos en el marco de la campaña política”, dijo.

Por su parte, Marta Lucía Ramírez, fórmula vicepresidencial de Duque, trinó, dirigiéndose a Popeye, que “a Gustavo Petro lo vamos a derrotar en las urnas. Vamos a ir de frente con todo el peso de la ley contra usted o cualquiera que amenace o ejerza la violencia para conseguir objetivos políticos”.

Sin agendas ocultas

Por su lado, el candidato Gustavo Petro señaló: “Tengan la absoluta confianza que no tenemos agendas ocultas. Que no tenemos odio. Lo que tenemos es ganas de que en Colombia se pueda construir justicia social y paz real”.

Petro tuiteó que “la paradoja para un uribista” es que “escogen a Duque, que no conocen, porqué lo pone Uribe, pero tienen que negar a Uribe tres veces. Cuando la base de la política es la mentira ocurren tales paradojas”.

Y sostuvo también que “a la política del odio y el miedo, sobre la que han cimentado su poder durante dos siglos, respondemos con la política del amor: el amor social es la solidaridad, es proteger al débil”.

Fajardo no paga votos

Entre tanto, Sergio Fajardo manifestó de manera tajante: “Ni un peso por un voto. Y ni un puesto ni un contrato para un congresista. Hay un fenómeno cultural y vamos a avanzar hacia una cultura de la legalidad. Solo así vamos a transformar a Colombia”.

Su campaña informó que “hasta la fecha 1.836 colombianos han aportado más de 240 millones de pesos a través de www.sergiofajardo.com, lo cual marca un hito en la consecución de pequeñas donaciones en campañas políticas nacionales. Esta cifra contrasta con las pocas donaciones de particulares registradas en el aplicativo Cuentas Claras de las demás campañas (http://www.cnecuentasclaras.com) donde  por ejemplo la campaña de Vargas Lleras, la de De la Calle y Petro reportan menos de tres donaciones de particulares”.

A través de un comunicado, la campaña registró que “nunca antes una campaña había logrado sumar tantos pequeños aportes, que significan un apoyo amplio a la candidatura de Fajardo. Sobre todo, ese número de aportes constituyen una muestra de que la candidatura genera confianza en muchos ciudadanos. Esto es algo extraordinario en un país donde los índices de confianza hacia los políticos son muy bajos, según muestran los recientes estudios de opinión del Centro Nacional de Consultoría y del Barómetro de las Américas LAPOP sobre Cultura Política”.

De la Calle resalta papel de las encuestas

El candidato del Partido Liberal, Humberto de la Calle, estuvo en Blu Radio y allí aseguró que reconoce el valor de las encuestas aunque estas lo muestren de último de cara a las elecciones. Sin embargo, recordó que en Costa Rica en las pasadas votaciones ganó el candidato que tenía el 6%.

“Por donde camino la gente se me arrima. Incluso los que me dicen que no están de acuerdo con mi posición y mis propuestas, me hablan de agradecimiento y respeto”, expuso.

Tras asegurar que “las soluciones agresivas o extremas no son buenas”, De la Calle manifestó que “en la cosa liberal yo veo un fervor y un cierto renacimiento de la base liberal”.

Y concluyó que “el carácter de un candidato presidencial es importante, no solo por la forma de conectarse con los electores, sino porque los electores tienen derecho a conocer su temperamento, pues en momentos de crisis siempre tienden a aflorar las debilidades y las fortalezas”.