Iberoamericano, acto de fe que se convirtió en legado | El Nuevo Siglo
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Viernes, 16 de Marzo de 2018
El Festival Iberoamericano de Teatro de Bogotá da la bienvenida a diferentes compañías nacionales y extranjeras que darán vida a varios escenarios de la ciudad

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EL FESTIVAL Iberoamericano de Teatro de Bogotá puso en el mapa a la capital colombiana, que ha abierto las puertas a miles de compañías nacionales y extranjeras, como ocurre en esta décimo sexta edición que va del 15 de marzo al 1 de abril.

¿Por qué es tan importante?

El mayor valor es su importancia cultural y la calidad de su oferta actoral. La programación del FITBO es una confluencia de teatro, danza, música, performance, circo, artes visuales y espectáculos multidisciplinares.

La diversidad, la pluralidad y la representatividad de los diferentes géneros y tendencias de las artes escénicas han sido características de este festival. Según Miguel Torres, dramaturgo, director de obras y novelista, “en Colombia es muy importante el FITBO, siempre lo ha sido. Pero lo más significativo son los grupos colombianos de teatro que le dieron vida a este evento. Sin la dramática colombiana, nunca habría podido existir el festival iberoamericano.”

En diálogo con este Diario, Torres cuenta que “lo que ha pasado es que el festival ha prevalecido, porque ha tenido mucho apoyo, pero al precio de que muchas agrupaciones desaparezcan por falta del mismo. Eso ha sido una cosa injusta, pero no quiere decir que el festival no merezca estar, y ojalá siga.”

En su decimosexta versión más de 40 obras provenientes de quince países, de las cuales dieciocho son colombianas, muestran por qué este festival es considerado el más importante de Latinoamérica.

Para esta ocasión,  los invitados de honor son los argentinos, quienes traen una gran variedad dramatúrgica y de alto nivel.  Diez puestas en escena son las encargadas de representar el teatro gaucho. El Instituto Nacional del Teatro a cargo del director ejecutivo, Marcelo Allasino, presentará cuatro espectáculos de su catálogo, quien aseguró: “estos representan con mucha contundencia la diversidad del teatro independiente argentino”. Además, expresó que: “desde el INT consideramos fundamental que la delegación oficial argentina en el FITBO de cuenta de nuestra diversidad y de nuestro alcance federal. Se trata de una oportunidad maravillosa, en el marco de una de las vidrieras más importantes de Latinoamérica y estamos muy contentos de que grandes trabajos de dramaturgos de distintas regiones nacionales puedan llegar.”

El festival en cifras

El interés por darle un espacio a las diferentes manifestaciones culturales ha sido fundamental para que prevalezca el festival. “Un acto de fe en Colombia”, fue el lema que Fanny Mikey y Ramiro Osorio escogieron como bandera de la primera muestra, la cual se llevó a cabo del 25 de marzo al 3 de abril de 1988, con motivo de la celebración de los 450 años de la fundación de Bogotá.

El primer festival contó con la participación de 59 compañías de 21 países, pertenecientes a tres continentes. La segunda versión titulada “los lenguajes del teatro del mundo” fue la casa para el intercambio de la dramaturgia colombiana con la del resto del mundo. En su cuarta versión, FITBO fue el evento sede del Premio Unesco para la Promoción de las Artes. Cinco continentes, 103 compañías de 28 países, 1.500.000 de espectadores enmarcaron la cifra récord de la época, donde Colombia tuvo un papel protagónico con el estreno de once obras y otras doce propuestas. En 2008, el proyecto alcanza otro nivel, al lograr la descentralización del festival, una iniciativa conjunta entre el Festival y el Ministerio de Cultura para llevar obras internacionales y nacionales a otras ciudades del país.

FITBO, fue declarado Patrimonio Cultural de Colombia por el Ministerio de Cultura, a través de la Ley 1686 de 2013: “…como un producto y una manifestación inmaterial que genera Colombia para el mundo…”

Según Manuel José Álvarez, director del Teatro Colón, el Iberoamericano: “era el festival más importante de Latinoamérica, no sé ahora. Es una prueba que están haciendo un grupo de empresarios privados. Ojalá lo saquen adelante, logren recuperar el FITBO que es un patrimonio de la ciudad y del país.” Además, dijo que espera: “vuelva a ser ese escenario académico, estético, de apuestas artísticas más que cuantitativas, ya que era un encuentro donde se veían las nuevas propuestas del mundo, no solamente de teatro, sino de la danza y la música. Espero que se recupere eso, sería realmente maravilloso y apostamos por eso.”

Al comparar otros escenarios importantes de teatro en Latinoamérica encontramos a Chile, con el Festival Internacional Santiago a Mil, que este año cumplió 25 años desde su creación. Un encuentro de artes escénicas realizado anualmente, el cual ha presentado cerca de 900 espectáculos nacionales, 400 internacionales, con 900 artistas cada año que provienen de 45 países y la asistencia de cerca de 10 millones de espectadores, lo cual ha marcado la historia de esta fiesta del teatro. Mientras el FITBO, ha presentado más de 800 funciones de 100 compañías internacionales y 170 compañías colombianas, reuniendo a las compañías de teatro más importantes del mundo llegando a contar con la asistencia de hasta dos millones seiscientos mil espectadores en el 2006.