Ampliación de Alianza Pacífico | El Nuevo Siglo
Martes, 6 de Marzo de 2018

*Colombia apuesta a nuevos y más atractivos mercados
*En mira Australia, Canadá, Nueva Zelanda y Singapur

La Alianza Pacífico es uno de los bloques comerciales de más rápida activación en las últimas décadas a nivel global. En muy poco tiempo los países fundadores - Colombia, Chile, México y Perú- lograron no sólo estructurar el complejo aparato normativo trasnacional que exige un proceso de integración económica de esta índole, sino que las respectivas agendas internas y ratificaciones legislativas correspondientes también se surtieron en pocos años. 
De esta forma la Alianza ha podido fortalecerse a tal punto que son muchos los países que ya actúan como observadores o buscan entrar al bloque multinacional. Y no es para menos, toda vez que, según datos del gobierno colombiano, la región Asia-Pacífico es la de mayor dinamismo económico en todo el planeta, ya que representa el 31 por ciento del comercio mundial, el 48 por ciento de la población y el 32 por ciento del Producto Interno Bruto global.
Precisamente desde el pasado fin de semana y hasta el viernes próximo se está realizando en Chile la tercera ronda de negociaciones entre las naciones fundadoras y las delegaciones de cuatro países que son candidatos a ser estados asociados, a saber: Australia, Canadá, Nueva Zelanda y Singapur. Temas como acceso a mercados de bienes, servicios e inversión y compras públicas así como asuntos migratorios para gestiones de negocios se están discutiendo en la capital austral.
La ampliación  del bloque es un asunto de trascendental importancia para Colombia, Chile, México y Perú, toda vez que las naciones que están pidiendo pista tienen un potencial económico muy alto, como es el caso de Canadá, en tanto que Singapur es una de las potencias asiáticas emergentes más fuertes. Australia y Nueva Zelanda también se distinguen por sistemas productivos muy desarrollados y con altos niveles de calidad de vida e intercambio comercial profuso.
Para Colombia incrementar su relación económica con esos cuatro estados es clave. Según datos del Ministerio de Comercio Exterior, el año pasado las exportaciones de nuestro país a Australia, Nueva Zelanda y Singapur alcanzaron casi 430 millones de dólares, con un aumento superlativo de más del 235 por ciento con relación a las ventas en 2016. Más importante aún es el intercambio con Canadá, a donde las exportaciones sumaron más de 526 millones de dólares, creciendo en un 33 por ciento frente al año inmediatamente anterior.
Por lo mismo, este proceso de ampliación de la Alianza Pacífico es vital para Colombia y su política de búsqueda y acceso a nuevos mercados. No pocos gremios productivos locales se mantienen al pendiente del avance de las negociaciones, complejas a cual más, con el fin de asegurarse de que las condiciones para el intercambio comercial sean equilibradas y con posibilidad de progreso a corto, mediano y largo plazos. En cada ronda, según los temas que se estén analizando, hay representantes de los respectivos sectores productivos con el fin de garantizar una complementariedad en materia de oferta y demanda objetiva de bienes, productos y servicios. Hay buenas oportunidades para los exportadores nacionales en los campos de agro, químicos industriales, farmacéuticos, chocolates, confites, galletería, confecciones, resinas, construcción, plásticos y manufacturas con distintos metales, entre otros.
Como se ve, lo que se está analizando respecto al ingreso de estos cuatro países a la Alianza es muy trascendental para el futuro del bloque. Es más, precisamente hoy los presidentes de Chile, Colombia, México y Perú realizarán una cumbre virtual para revisar el avance de las tratativas y el plan de  proyección fijado para cumplirse hacia el año 2030.
Es claro que en estos tiempos de economía globalizada todos los países deben apuntalar su estrategia de intercambio comercial. Colombia en los últimos años ha venido, en medio de un enfriamiento productivo y la crisis en los precios del petróleo, avanzando en esa dirección, sobre todo a punta de tratados de libre comercio (TLC). Semanas atrás el DANE informaba que hubo un superávit comercial de 485 millones de dólares en diciembre pasado y que en todo ese año el país redujo en casi 5.000 millones su desbalance comercial frente al 2016. Si se logra llevar a buen término las negociaciones con los cuatro países candidatos a asociados de la Alianza Pacífico el objetivo es que Colombia tenga acceso a mercados muy atractivos para nuestra oferta exportadora en unos pocos años. Es evidente que hay que tomar muchas precauciones, como en toda negociación de índole comercial, pero ya con tantos TLC que se han negociado el país tiene una amplia experiencia acumulada y se espera que no deje flancos débiles desprotegidos.