Ante la propagación del coronavirus, los organismos legislativos han tenido que atender la orden de confinamiento impuesta por los respectivos gobiernos.

Legisladores de todo el mundo debieron aplazar importantes debates, como ocurrió con la Duma rusa, que decidió modificar las fechas del plebiscito inicialmente convocado para el 22 de abril para que los ciudadanos del país manifiesten si están de acuerdo con que Vladimir Putin pueda presentarse para un nuevo periodo de estadía en el Kremlin.

En varios países se suspendieron parcialmente las labores legislativas. Así sucedió en Estados Unidos, Chile, Argentina, Alemania, Francia, Polonia, Canadá, Brasil y Guatemala. Pero en Reino Unido, España e Italia, entre otros, que siguen manteniendo sesiones presenciales con muchos requerimientos y restricciones de acuerdo a la normativa establecida por las autoridades sanitarias.

En Italia, el país más afectado del Viejo Continente, los legisladores cumplieron con algunas sesiones presenciales en el transcurso de la semana. En Roma, el primer ministro Giuseppe Conte declaró que la velocidad con la que el coronavirus se está propagando es impresionante y que Italia estaba viviendo una de las pruebas más duras en su historia. “La propagación de la epidemia de coronavirus ha desencadenado una crisis sin precedentes en Italia y Europa que está poniendo a nuestro país en una prueba muy dura”, añadió.

Conte habló ante un recinto parlamentario casi vacío. Menos del 75 % de los congresistas estuvo en la sesión. Los pocos que se hicieron presentes ingresaron con tapabocas, guantes de látex y permanecieron a más de un metro de distancia de su colega más próximo.

En España, el segundo país europeo en cuanto a impacto del coronavirus, el gobierno de Pedro Sánchez suspendió todas las actividades no esenciales y el Congreso aprobó la extensión del Estado de Alarma por 15 días más. En una sesión sin precedentes, el pleno se encontró casi vacío, ya que de 350 congresistas 306 solicitaron votar telemáticamente. Solo había 40 personas en el recinto.

La canciller alemana Ángela Merkel tomó la decisión de trabajar vía virtual de la mano con el parlamento, luego de dar negativo en las pruebas que le realizaron por coronavirus. Alemania es uno de los países que menor tasa de contagios presenta en Europa gracias a las rápidas acciones de las autoridades.

En otro orden de ideas, Estados Unidos superó a China en el número de contagios y por ello, mantiene en aislamiento el Congreso. Mientras se generan políticas económicas para mitigar las consecuencias de la pandemia, los candidatos a la nominación demócrata por la presidencia, Joe Biden y Bernie Sanders, desde casa relanzan sus campañas las cuales sufrirán modificaciones en sus discursos pues, el coronavirus se volvió el foco de atención de la sociedad por el momento.

Por su parte, en lo que confiere a la OEA (Organización de Estados Americanos), las sesiones que se han celebrado se llevaron a cabo a través de videoconferencias, tal como ocurrió cuando los integrantes de la entidad reeligieron a Luis Almagro como secretario General.

Congreso colombiano aún busca alternativas

Luego de una reunión que sostuvieron los presidentes del Senado y la Cámara junto con algunos voceros de los partidos, la conclusión es que aún persisten las dudas para que el Congreso pueda sesionar de manera virtual.

Más de 100 profesores constitucionalistas de distintas universidades enviaron una carta a las mesas directivas del Congreso asegurando que se puede sesionar. “Mediante el Decreto Legislativo 491 del 28 de marzo de 2020, y en desarrollo de la Emergencia Económica, Social y Ecológica, el Presidente de la República facilitó un mecanismo de reunión no presencial de las ramas del poder público durante esta emergencia”, dijeron.

Según los académicos, “creemos que la pandemia que actualmente afecta al país no puede poner en riesgo el Estado Social de Derecho en Colombia, la democracia constitucional y el normal funcionamiento del sistema de frenos y contrapesos. Por esta razón, se hace necesario garantizar por el medio que sea más idóneo el funcionamiento de las ramas del poder público y muy especialmente del Congreso de la República, órgano de representación de la democracia por excelencia”.

Los profesores indican que “las disposiciones actuales del Estado de Excepción impiden de manera clara que los Congresistas puedan sesionar en la ciudad de Bogotá para aprobar una modificación del Reglamento del Congreso que habilite el desarrollo de sesiones virtuales. El funcionamiento del Congreso de manera presencial pone en riesgo la salud y la vida de los congresistas y de sus equipos de trabajo. Y genera, además, en las actuales circunstancias que los miembros del Congreso sean       potenciales vectores en el contagio del virus en sus regiones”.

Sin embargo, hay congresistas que aún no le apuestan a la idea, pues sugieren que las sesiones virtuales aparte de no tener validez constitucional pueden darse para trampas y triquiñuelas, “el problema de lo virtual no es que se use para opinar sino para aprobar leyes. Puede opinarse así. Pero aprobar leyes así es ilegal y de alto riego de trámites fraudulentos, y en un país con leyes tan malas, como lo muestra la actual crisis ¿Y qué leyes quiere aprobar Duque?”.

El Congresista agrega “¿Qué leyes quiere que le apruebe el Congreso con el sistema ilegal de las sesiones virtuales? ¿Las reformas pensional y laboral? Por favor, señor Presidente, dé la lista de las leyes que propondrá el Gobierno”.