La semana comenzó con un nuevo episodio en la ya larga serie de contrapunteos entre líderes políticos de la centroizquierda sobre la necesidad de unirse de cara a las elecciones presidenciales de 2022.
Como se sabe, este sector de opinión está dividido en dos grupos: uno que sigue al exgobernador Sergio Fajardo, del movimiento Compromiso Ciudadano, y otro que apoya al senador Gustavo Petro, de Colombia Humana.
Hasta ahora, se prevé que ambas coaliciones tendrán su consulta interpartidista en marzo, de manera que llegarán cada una con su propio candidato a la primera vuelta presidencial, programada para mayo de 2022, a pesar de que algunos militantes de las colectividades que integran ambos grupos abogan por que confluyan todos en una sola jornada electoral.
En ese contexto, se está proponiendo que los dos sectores suscriban un compromiso de apoyarse en la segunda vuelta de junio, es decir que desde ya se pacte que quien no pase a esa instancia impulse la candidatura de quien sí lo haga.
Pacto previo
Por eso, ante los trinos y declaraciones insistentes que se dieron ayer sobre la urgencia de buscar la unidad antes de la primera vuelta, el representante por Bogotá, Inti Asprilla, de la Alianza Verde, señaló que “claro que se debe insistir en la unión para primera vuelta, pero desechar de plano la posibilidad de dialogar sobre un pacto previo para segunda vuelta (incluso con tono agresivo algunas veces) es un grave error”.
La precisión de Asprilla, como ya se dijo, se dio en medio de numerosas expresiones sobre la unidad, pero que no hablaban del pacto previo.
Uno de los que más se refirió al tema fue el senador Roy Barreras, candidato presidencial de la Alianza democrática Afrocolombiana (ADA) que ya está planillado para acudir a una de las consultas de marzo, en la que estará con los también senadores Petro y Alexander López, del Polo Democrático.
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Barreras expuso que “después del triunfo de la derecha en Ecuador llamo a la centroizquierda colombiana a la unidad, a seguir creciendo sin pánicos y sin falsas conclusiones”.
Según el congresista, “el establecimiento económico y político tradicional se une para defender sus privilegios. Invierte el dinero que sea necesario para mantenerse en el poder, compra conciencias, votos y medios de comunicación, fabrica falsos mensajes, intenta sacar del juego a sus opositores y los capitales legales, especuladores, terratenientes y mega-ricos se unen a los capitales ilegales que prostituyen la política con ríos de dinero y además matan liderazgos sociales. No hay un solo narcotraficante que no sea un capitalista salvaje, incluidos clanes y disidencias”.
Para él, “en Colombia debe ocurrir lo contrario a lo que ocurrió en Ecuador. La centroizquierda y todas las fuerzas alternativas debemos unirnos. Ya lo hicimos una vez en 2014. En primera vuelta del 2014 ganó la derecha extrema con su propuesta de guerra, concentración de riqueza y Estado mínimo. En segunda vuelta nos unimos centro e izquierda y los derrotamos en aras de la paz posible. Ahora en aras de la democracia misma la unidad es una obligación histórica”.
“Invito a un nuevo esfuerzo de unidad a la coalición verde esperanza, liberales y Pacto Histórico. Tenemos tiempo. Tenemos fuerza. Tenemos causa común, tenemos la razón y el corazón para hacerlo. El triunfo, la paz y la democracia está en nuestras manos. Hagámoslo”.
También opinó sobre el tema el senador Wilson Arias, del Polo Democrático, anotando que “nos lamentamos de la división en Ecuador, pero tenemos el gatillo fácil para disparar con 140 caracteres y para subirnos en un trono moral enorme, alto y casi solitario. No es por voluntarismo, es por necesidad. Tendamos puentes y empecemos por cuidar los que aún nos quedan”.
A su vez, la representante por Bogotá, María José Pizarro, de la Lista de la Decencia, comentó que “como mujer, como colombiana estamos llamadas a convocar y construir el consenso. Yo hoy lo asumo como una causa. No podemos descansar hasta tener una Colombia digna para heredarle a toda la niñez y la juventud de nuestra tierra”.
En tanto que Petro tuiteó que “la dispersión del campo democrático y popular del Ecuador le entrega el país a lo más retardatario de la economía, el capital financiero, y de la política. Igual puede pasar en Colombia. Cuatro años más de uribismo. Un cuarto de siglo en el poder”.
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Coalición
En medio de estas y otras expresiones, el representante Asprilla recordó que el 26 de marzo se refirió al tema, manifestando que si Fajardo, “Juan Manuel Galán y Jorge Enrique Robledo insisten en no permitir si quiera un acuerdo entre partidos de oposición para la segunda vuelta a pesar de la decisión de la Alianza Verde no debe haber Coalición de la Esperanza con ellos. Así de simple”.
En esa oportunidad, Petro señaló que “para mitigar el daño que las mayorías de la dirección del Partido Verde le hace a una convergencia democrática que cambie a Colombia, sus bases deben tomar la decisión de incorporarse a los comités del Pacto Histórico en todos los municipios del país. Bienvenidos”; pero Asprilla le replicó: “Comprendo la desazón que genera la decisión de no ir juntos en primera vuelta, pues yo tampoco la comparto. Sin embargo, la propuesta de hacer un pacto previo para la segunda vuelta implica un avance importante respecto al 2018, sobre la que debemos dialogar”.
Sobre la referencia a Ecuador, Asprilla dijo ayer que “ha ganado la derecha en Ecuador, el que no pasó a segunda vuelta llamó a votar en blanco. Tanto debate insulso a los que se dedican algunos de la oposición por encima incluso de enfrentar al uribismo, no servirá de nada en caso de una nueva derrota. Recapacitemos y busquemos unión”.