En positivo | El Nuevo Siglo
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Miércoles, 14 de Abril de 2021
Redacción Política

Un proyecto forestal comercializado a través de un Fideicomiso está permitiéndole al país avanzar simultáneamente en dos importantes tareas pendientes para potenciar el agro: la reforestación con fines de conservación e impacto social y la siembra de productos agrícolas de alta rentabilidad económica.

Pablo Trujillo, presidente de la Junta Directiva de Acción Fiduciaria señala que “Colombia tiene un potencial agrícola enorme, pero está muy lejos de tener un agro industrializado, salvo unas pocas industrias como la caña de azúcar o el café. Por ello, se requiere de mecanismos como la fiducia para lograr que el inversionista de a pie pueda invertir en activos que generan buena rentabilidad y, a la vez, contribuyen al medioambiente”.

Crecer es un proyecto forestal innovador porque, en primer lugar, es el primero en su tipo que está permitiendo que pequeños, medianos y grandes inversionistas sean propietarios de un área de 21.000 m² de árboles con la adquisición de participaciones fiduciarias (también conocidos como derechos fiduciarios). El proyecto contempla la siembra de 10.000 m² de bosques maderables plantados (algunos ya cuentan con 9 años de crecimiento y están listos para ser aprovechados como materia prima) y 11.000 m² de bosques de conservación en un terreno ubicado en el municipio de Puerto Gaitán, departamento del Meta.

Desde el punto de vista de los negocios, Crecer es una inversión atractiva para todo tipo de perfiles ya que su rentabilidad está soportada por la operación forestal en tres importantes componentes:

1. Valorización de la tierra. Un terreno es una inversión segura a largo plazo, pues el valor por metro cuadrado solo tiende al alza en el tiempo y no acarrea gastos de mantenimiento.

2. Los árboles. Con el tiempo, los árboles incrementan su valor comercial (por la comercialización de la madera, un insumo no renovable y muy valorado por el público) y biológico (por su importancia en los ecosistemas y en la protección del recurso hídrico).

3. Certificados de carbono. Desde el 2016, el impuesto nacional al carbono es una tarifa que deben pagar las empresas por sus niveles de carbono emitidos al ambiente en forma de gases de efecto invernadero. Con una participación fiduciaria en Crecer, una compañía puede evitar el pago de este tributo.

Cualquier persona puede vincularse a través de una inversión desde $30 millones de pesos a este primer proyecto forestal comercializado bajo el esquema fiduciario que hará de la conservación de bosques en Colombia una actividad rentable.