La presidenta del Consejo Gremial y de Camacol, Sandra Forero Ramírez, señala la crítica situación para, al mismo tiempo, sostener el empleo y mantener los proyectos de inversión

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Ante la situación actual de la economía, es cada vez más complicado sostener la plena actividad de las empresas. Por ejemplo, el gremio de la construcción, como otros del país, ha tenido un freno en seco como la economía. El riesgo es que 1,5 millones de personas se queden sin empleo.

Poniendo de urgencia planes de contingencia, el sector de la construcción es uno de los más golpeados del país ante la crisis generada por el Covid-19 y la cuarentena obligatoria para frenar su expansión.

En peligro están inversiones cercanas al 9% del Producto Interno Bruto (PIB). No en vano, ya se han frenado 2.000 obras de vivienda y cerca de 7.8 millones de metros cuadrados en proyectos de construcción no residenciales.

La presidenta de la Cámara Colombiana de Construcción (Camacol), Sandra Forero Ramírez, quien también está al frente del Consejo Gremial Nacional, describe la situación del sector.

Fuerte impacto

EL NUEVO SIGLO: Desde el punto de vista de los constructores, ¿cómo los pilla esta situación de crisis y recesión?

SANDRA FORERO RAMÍREZ: La emergencia que estamos viviendo impacta toda la cadena de valor del sector de la construcción, desde la comercialización y preventa de los proyectos, pasando por el desarrollo de la obra, la cadena de suministros, hasta la financiación y entrega de las viviendas. Hoy enfrentamos un cese de actividades generalizado, salvo pequeñas intervenciones en obra para prevenir riesgos y mantener seguridad en las mismas y el entorno. Para sortear esto, se han adoptado valiosas prácticas empresariales que van desde adelantar pagos de contratos de obra, sostener la nómina directamente, adelantar vacaciones, hasta apoyos directos a trabajadores en bonos de alimentación.

Así mismo, como sector hemos venido trabajando de manera permanente en estándares estrictos y protocolos de trabajo en obra y suministro de materiales que nos permitan entrar de nuevo en operación oportunamente que preserven como prioridad la salud integral de los trabajadores y desde luego, apoyen y respeten todas las directrices de aislamiento general o parcial que se adopten luego del 13 de abril.

ENS: La construcción es uno de los sectores que más empleo genera en la economía, ¿qué se está haciendo para preservarlo?

SFR: La coyuntura reciente describe un desafío enorme para sostener los cerca de 1,5 millones de empleos directos que genera el sector de la construcción, así como para los 1,7 millones de personas que trabajan en actividades inmobiliarias y relacionadas. Nuestro propósito en esta fase de aislamiento preventivo obligatorio es preservar la seguridad integral de nuestros trabajadores y eso implica su salud, así como su sostenimiento, donde pese al cese de actividades, se puedan sostener las nóminas durante este periodo. Más allá del periodo, el escenario de sostenibilidad de las empresas se hace muy complejo.

Proyectos

ENS: ¿Se han frenado proyectos ante la actual situación?

SFR: Hoy tenemos más de 2.000 frentes de obra en proyectos de vivienda y cerca de 7,8 millones de metros cuadrados en proyectos de construcción no residenciales, que han cesado actividades. Hemos estimado que esas inversiones equivalen a cerca 9 puntos porcentuales del PIB. 

ENS: ¿Qué medidas urgentes piden los constructores al Gobierno para paliar en algo la falta de liquidez?

SFR: Nuestro sector es clave para el empleo del país, la economía y el desarrollo regional. Hoy ocupamos de manera directa e indirecta el 14% total de trabajadores en el país y tenemos encadenamientos productivos con el 54% de los sectores económicos. En ese sentido, sí se requiere que nuestro sector sea priorizado en las medidas que se adopten así como en los planes venideros de reactivación económica que se estén impulsando. Las propuestas que hemos realizado han estado enfocadas en garantizar la seguridad integral del trabajador, adecuar los temas regulatorios y administrativos del sector, dada la contingencia, así como buscar instrumentos y formas de financiación para las empresas, diseñar acciones de reactivación y protocolos de operación bajo esta nueva coyuntura de salud pública.

Operaciones

ENS: ¿Qué tan preparados estarían para reabrir paulatinamente las operaciones el 14 de abril?

SFR: Esperemos que la evolución de la curva de contagio se aplane evidenciando que la medida adoptada surte los efectos previstos, pero desde ya, estamos trabajando para que cuando se levante la medida de aislamiento se reinicien nuestras operaciones aplicando estrictos protocolos de seguridad, protección y prevención en los más de 2.000 proyectos de construcción que tiene el país.

ENS: ¿Cuáles son los sectores que están más amenazados dentro del gremio?

SFR: Esta coyuntura impacta toda la cadena de valor del sector de la construcción, desde la comercialización y preventa de los proyectos, pasando por el desarrollo de la obra incluyendo a nuestros contratistas de mano de obra y de procesos, la cadena de suministros, hasta la financiación y entrega de las viviendas. Hemos estimado que esas inversiones equivalen a cerca de 9 puntos porcentuales del PIB.

LA PRESIDENTA del CGN y de Camacol, Sandra Forero, señala la importancia de preservar el empleo y la actividad productiva. /Cortesía

RECUADRO

“Mercados que construyen”

Con el aislamiento preventivo obligatorio en todo el país, cerca de 480.000 trabajadores de obra en el sector constructor de edificaciones, ven impactadas sus labores. Con el propósito de generar bienestar a estos colombianos y brindarles un apoyo para su sustento, la Cámara Colombiana de la Construcción (Camacol) lanzó la iniciativa “Mercados que Construyen”.

“Queremos unir esfuerzos de los empresarios del sector para apoyar a los que día a día construyen las viviendas de los colombianos y hacen realidad sus sueños de tener casa propia. Por medio de esta iniciativa, les daremos la posibilidad de recibir alimentos y productos de primera necesidad en diferentes supermercados, gracias a la donación de los empresarios”, dijo Sandra Forero.

Las empresas que voluntariamente se vinculen al programa suministrarán el listado de trabajadores que desean beneficiar, definirán el valor a donar para cada colaborador y anunciarán directamente a los favorecidos sobre el beneficio que recibirán y el lugar dónde pueden hacerlo efectivo. Los trabajadores beneficiados podrán dirigirse con su documento de identidad al supermercado con el que la empresa haya realizado la alianza, para acceder a su bono y comprar los productos de canasta familiar que requieran para su hogar.

Hasta el momento, Camacol ha hecho alianza con Colsubsidio y con el Grupo Éxito, a través de su red de Almacenes Éxito, Carulla, Superinter y Surtimax, logrando que esta iniciativa tenga un alcance nacional.