Venezuela arranca la Copa América contra Perú el sábado a las 2:00 p.m. con las expectativas altas y queriendo superar las actuaciones de 2007 y 2011, cuando se llegó a cuartos de final
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Inevitable, sí, es inevitable ilusionarse con La Vinotinto. Gratamente hay que decir que los años en que nos conocían en el mundo del deporte solo por el béisbol pasaron ya hace rato, y que a este se sumaron el baloncesto, el voleibol y por supuesto, el fútbol, entre muchos otros.
A los grandes nombres de la historia del deporte vinotinto; Víctor Davalillo, César Tovar, Alfonso “Chico” Carrasquel y Andrés Galarraga (dejo por fuera excesivamente a muchos) se suman hoy por hoy hombres del balompié. Y es que quién no gritó cuando la zurda mágica de Juan Arango marcaba esos golazos de tiro libre, quién no se emociona con la garra que entrega Tomás Rincón o quién no levantó su vaso cuándo Luis Manuel Seijas ganó la Suramericana con Santa Fe.
Ya son varios hitos que ha logrado nuestra selección, y sí digo nuestra, porque estas palabras las escribe un venezolano, que como muchos, ve hoy su tierra desde fuera. Hoy desde Colombia puedo decir que el prejuicio que existía de que los nuestros no jugaban al fútbol o eran ajenos a él ya no existe en suelo cafetero y los comentarios hechos hace años por chilenos, uruguayos y brasileños menospreciando al 11 llanero ya no están vigentes.
Copa América
Este sábado la Selección de Venezuela se estrena ante la siempre incómoda Perú, esa misma oncena que nos ha quitado tantos puntos en eliminatorias para mundiales, misma que ha ganado en suelo petrolero y misma que esta vez intentará dejar en vergüenza a un equipo que quiere dejar de ser subestimado para empezar a ser temido.
A las 2:00 de la tarde, hora Colombia, la Vinotinto de Rafael Dudamel saltará al gramado con la ilusión de un país que pasa por el peor momento de su historia; los jugadores besarán el campo con la mirada fija de un gentilicio regado por el mundo que añora una buena noticia y por un orgullo que los obliga a ser parte de algo importante, de ser protagonistas y de dejar plasmada sus firmas de una vez por todas, en el ya centenario libro de la Copa América.
Por su parte, los de Ricardo Gareca, Paolo Guerrero y compañía llegarán a imponer condiciones, tienen mucho qué demostrar; desde que salieron del Mundial de Rusia 2018 han encajado seis derrotas, la última el domingo pasado por 0-3 ante la siempre poderosa Colombia, un empate y tres victorias.
No obstante, la superioridad ya no se vislumbra en el campo, en las eliminatorias pasadas ambos cotejos quedaron 2-2 y en los comentarios de sus jugadores ya existe el respeto: “Venezuela es un equipo que está en crecimiento, Perú ya lo viene haciendo hace algún tiempo, en cuatro años hemos cambiado poco pero cualquier cosa puede suceder el sábado, es un partido de Copa y todo puede pasar”, dijo Renato Tapia, una de sus figuras.
Pero aunque todo comienza con Perú no todo termina ahí, luego estarán Brasil (martes a las 7:30 p.m. hora Colombia) y Bolivia (sábado siguiente a las 2:00 p.m. hora Colombia). Cada partido será una final para la Vinotinto, cada entrada, cada balón dividido, cada remate al arco deberá ser como si fuera para ganar la Copa, ya que podrá haber buen fútbol, pero si los muchachos no se lo creen y no dejan la piel en la cancha, será imposible ganar en la confederación más difícil del fútbol mundial.
Los de Dudamel
La Selección de Venezuela arriba al certamen continental más longevo en la historia del fútbol mundial como la tercera plantilla más joven, siendo su participación 18 y con las esperanzas puestas en superar las actuaciones de 2007 y 2011, cuando se llegó a Semifinales.
A la cabeza, Rafael Dudamel se apersona en suelo brasileño con tres años al frente de la selección petrolera, la Copa América de Estados Unidos como referencia, unos amistosos que dejaron buenas sensaciones, sobre todo el último, y una plantilla que al margen de tener buenos nombres ha sido criticada por dejar fuera tanto a Yeferson Soteldo, 10 del Santos de Brasil, que terminó entrando tras la lesión de Adalberto Peñaranda; y de Rómulo Otero, ex número 10 del Atlético Mineiro y sin duda la mejor pegada de derecha que tenía entre sus disponibles.
Y es que sería interesante saber por qué Adalberto Peñaranda, quien venía de una lesión, de casi no jugar en el Watford de Inglaterra y que además no estaba a ritmo fue convocado. Lo mismo de Luis Manuel Seijas, quien ya con bastante fútbol en sus piernas fue suplente en el campeonato colombiano en el combinado santafereño, mismo que llegó de penúltimo lugar en la Liga Águila.
Ahora, la columna vertebral del equipo estará en Brasil. Tomás Rincón, inamovible y eje central del once vinotinto, será quien dirija desde dentro a sus compañeros; Salomón Rondón, “el Gladiador” será el encargado de finalizar las jugadas, ser el poste, molestar a la defensa y claro, está llamado a ser el goleador; y por supuesto, Wuilker Fariñez, el mejor guardameta hoy por hoy del certamen colombiano, con 21 años y pretendido por varios clubes del continente, incluso se llegó a decir que existieron conversaciones con el Barcelona.
Pues todo está servido para que la Copa América arranque y con ello la ilusión vuelva a volar desde el Pico Bolívar hasta las desembocaduras en Delta Amacuro. ¡Vamos Vinotinto!
Recuadro: Acá los 23
Delanteros: Salomón Rondón, Josef Martínez y Fernando Aristigueta
Volantes: Tomás Rincón, Arquímedes Figuera, Yéferson Soteldo, Junior Moreno, Yangel Herrera, Luis Manuel Seijas, Juan Pablo Añor, Jhon Murillo, Jéfferson Savarino, Darwin Machís.
Defensores: Ronald Hernández, Rolf Feltscher, Yordan Osorio, Mikel Villanueva, Jhon Chancellor, Roberto Rosales y Luis Mago.
Porteros: Wuilker Fariñez, Rafael Romo y Joel Graterol.
Así abriría ante Perú
Wuilker Fariñez
Ronald Hernández, Mikel Villanueva, Jhon Chancellor, Mikel Villanueva
Yangel Herrera, Tomás Rincón, Junior Moreno, Darwin Machís
Jhon Murillo y Salomón Rondón