En paz transcurrió paro nacional convocado por centrales obreras | El Nuevo Siglo
Foto Diana Rubiano
Miércoles, 21 de Octubre de 2020
Redacción Nacional

Después de sumarse a la jornada nacional de protesta convocada por las centrales obreras, la Minga del Suroccidente Colombiano comenzó a regresar a sus territorios, en especial al departamento del Cauca.



Con la misma normalidad con que ingresaron a la capital del país el pasado lunes, tras permanecer en Ibagué y Fusagasugá, las comunidades indígenas llegaron a un acuerdo con la administración de la alcaldesa Claudia López y desde la noche del martes comenzaron a preparar su regreso.

La administración, a través de varios de sus funcionarios, destacó la “tranquilidad” en que se dio la concentración indígena, el “respeto y acatamiento a las medidas de bioseguridad”, y la pulcritud y limpieza con que se marcharon, pues no hubo desórdenes.

Eso sí, como dijo la líder a la ONU Aída Quilcué, “nos vamos con la decepción de que no haber sido recibidos por el presidente (Iván) Duque”.

Mientras tanto, este miércoles a media tarde la Plaza de Bolívar de Bogotá comenzó a llenarse centenares de trabajadores que respondieron al llamado de las centrales obreras.

Nelson Alarcón, presidente de Fecode, el gremio del magisterio, reiteró que esperan que el Gobierno nacional responda a las propuestas que han formulado os educadores, pues de lo contrario iniciarán un paro nacional indefinido.

Alarcón dijo que los docentes se oponen al modelo de alternancia y propusieron terminar el año lectivo de forma virtual.

Insistió e dirigente sindical en que “no hay condición es de seguridad y salubridad” para los maestros y los estudiantes, y dijo que el Gobierno “no ha cumplido ni el 30%” de los compromisos que suscribió con Fecode el año pasado tras un paro de casi dos meses".

“El año pasado firmamos con el Gobierno más de 36 acuerdos de los cuales solo 30% han sido cumplidos, entonces no nos deja otro camino que irnos al paro lo que necesita el país es “un gran acuerdo nacional para mejorar la calidad educativa”, pues dijo que la calidad de la educación no se puede determinar por los resultados de las llamadas Pruebas Pisa ni por los exámenes del Icfes.



Adicionalmente, dijo que el sector educación requiere de amplias inversiones en infraestructura, dotación de colegios y escuelas, alimentación para los niños y mejores condiciones laborales para los docentes.

Varias concentraciones

En Bogotá como en las principales ciudades del país este miércoles se dieron cita indígenas, profesores, estudiantes y sindicatos que marcharon en una jornada por demás tranquila que contrastó con las alteraciones de orden público registradas en marchas anteriores.

A pesar del llamado del Gobierno y os gremios para cancelar la jornada, miles de colombianos salieron a las calles a protestar por diferentes razones.

Un vocero de los estudiantes universitarios se quejó de que el Gobierno “no nos ha cumplido los acuerdos que firmamos el año antepasado”, en especial la revisión de las deudas con el Icetx.

A su turno, voceros del Comité Nacional de Paro el dirigente de la CUT, Diógenes Orjuela, reiteró que la jornada se justifica “por la muerte de líderes sociales y la agenda legislativa que impulsa el Gobierno nacional contra los trabajadores”.

Más allá de la queja común por el repunte de la violencia, la jornada dejó ver el malestar generalizado en varios frentes. “Es una conjunción de múltiples causas que tienen que ver con la forma en que este Gobierno ha manejado la protesta, que ha sido de estigmatización y cuestionamiento”, le dijo a Afp Felipe Botero, politólogo de la Universidad de los Andes.



Mientras tanto, las autoridades informaron al cierre de esta edición que ni en Bogotá ni en las 24 ciudades donde, según el Comité Nacional de Paro, se registraron manifestación, hubo disturbios ni conflicto con las autoridades.