El país no puede caer en debate prolongada entre estructura tributaria de Carrasquilla y  sugerencias de quienes plantean otras estrategias para lograr más recaudo en presupuesto de la nación, ante los requeridos 14 billones para 2019.

Si toma vuelo el  IVA a la canasta, el estallido alcista en precios al consumidor comenzará en diciembre. El  ciudadano del común, poco y nada cree en la devolución prometida; peor, si el proceso lo otorgan a un particular inflado como contratista eficiente. Es el país que tenemos.   

 Al abrir este enfoque se observa punto de origen de gastos en fondos estatales creados hace décadas, junto con agencias especializadas. Tienen funciones que pueden cumplir dentro de los ministerios.

Y probado está: hay objetivos de investigación por corrupción desatada en los últimos cuatro años, a instancias de contratación pública, de alta  magnitud, como la Refinería de Cartagena -Reficar-.

Se salva el Fondo de Garantías Financieras -Fogafín- que ha refinanciado a empresas públicas y privadas, en favor de socios y ahorradores, afectados en pasadas crisis y estallidos bancarios en los años 80.   

Un proyecto  que sigue en contratación dudosa,  es el túnel de la Línea, calificado por esta columna, como el Monumento Nacional a la Corrupción. No hay billón que le aguante. Su negocio es solicitar prórrogas hace 10 años.

En contraste positivo, el Fondo Nacional del Ahorro, promueve en sector laboral, ahorro de asalariados con censantías, para vivienda y educación, con meritorios resultados para mostrar; Funcionarios aseguraron hace poco que, entre sus logros alejó politiquería al máximo, para continuar apoyo social.

 Fonade  y Findeter tienen labores y resultados tangibles en áreas regionales; revelan que hace años trabajan enfrentando politiquería desde afuera; Fusionadas las dos, beneficiarían más obras y servicios.

Las universidades, Nacional y Sergio Arboleda, en estudio con la Escuela de Administración Pública, concluyeron este año, que transparencia es meritocracia, si hay eficiencia, agilidad en servicio y atención práctica y efectiva.

El estudio dice que se pierde 20 % de Presupuesto de Nación por malos manejos de agencias y fondos estatales, al decidir contratación con particulares en diversos campos de desarrollo.

El vice ministerio de Infraestructura advirtió, días atrás, que no habrá rehabilitación del Río Madalena, ni recuperación del Ferrocarril Nacional, pese a que este último ha contado con interés del gobierno Británico.

El proyecto a mitad de camino, para las dos obras, requiere $3 billones y medio. Y es clave para el desarrollo central del país.

Así quedan a la vista, huecos que validan el anuncio del Gobierno tendiente ahora a disminuir costos, con menos entidades en 2019.

El gasto a lo loco, indigestó con mermelada, al Gobierno que se fue y, sus obsecuentes servidores. Ahora se reconoce: reducción estatal es ahorrar.