DE LA misma época de Rubens, Velázquez, Giordano o Calderón de la Barca, el famoso ensamble vocal e instrumental español “La Grande Chapelle”, llega al Teatro Mayor Julio Mario Santo Domingo de la mano del Festival Internacional de Música Sacra de Bogotá (Fimsac) para deleitar a los colombianos con un repertorio clásico y de renombre.
El concierto se centra en los géneros en castellano: los tonos, destinados a cantar el amor humano o divino, y los villancicos dedicados a diversas festividades religiosas. Son obras barrocas exquisitas que expresan en música los afectos contenidos en los textos poéticos en el distintivo estilo hispano.
A las 8:00 de la noche el Teatro Mayor abrirá su telón y presentará la música para la Capilla Real (Siglo XVII), bajo la dirección de Albert Recasens, de España.
De igual forma, estarán los compositores más representativos de la Corte madrileña en tiempos de los Austrias: desde Carlos Patiño (1600-1675), longevo maestro de capilla de Felipe IV, y Juan Hidalgo (1614-1685), arpista de la Real Capilla y célebre compositor de música teatral y de la cámara, hasta Sebastián Durón (1660-1716), organista y maestro al servicio de las dos dinastías.
Esta presentación se realiza en coproducción entre el Teatro Mayor Julio Mario Santo Domingo y el Fimsac con el apoyo de la Embajada de España en Colombia, el Instituto Nacional de las Artes Escénicas y la Música INAEM, el Ministerio de Relaciones Exteriores, Comunidad Europea y Cooperación y la Agencia de Cooperación Internacional para el Desarrollo Aecid.
“La Grande Chapelle”
“La Grande Chapelle” es un conjunto vocal e instrumental de música antigua con vocación europea, cuyo principal objetivo es realizar una nueva lectura de las grandes obras vocales españolas de los siglos XVI a XVIII, con especial predilección por la producción policoral del Barroco. Al mismo tiempo, tiene el propósito de contribuir a la acuciante labor de recuperación del repertorio musical hispano. Fue fundado en 2005 y en 2010 recibió el Premio FestClásica (Asociación Española de Festivales de Música Clásica) por su contribución a la interpretación y recuperación de música inédita española.
Se ha erigido en poco tiempo en referencia ineludible en el panorama de la música antigua española, gracias al equilibrio de sus versiones −con acento sobre las voces− y al rigor musicológico.
Se destaca por ofrecer una nueva visión del gran repertorio vocal hispano, siempre con experimentados solistas internacionales.
Mediante su trabajo concienzudo de recuperación del patrimonio musical español, ya sea en conciertos o grabaciones, se ha ganado el respeto de las instituciones y la crítica.
Programa
- '¡Venid, querubines alados!', de Juan Hidalgo
- 'Al dichoso nacer de mi Niño', de Juan Hidalgo
- '¡Ay, infelice de aquel agresor…!', de Sebastián Durón
- '¡Ay de mí!, que el llanto y la tristeza', de Sebastián Durón
- 'Jácara', de Lucas Ruiz de Ribayaz y Gaspar Sanz
- 'Anarda divina', de Juan Hidalgo
- 'Todo es enigmas amor', de Sebastián Durón
- 'Afuera que sale con ejércitos de flores', de Manuel Machado
- 'No puede amor hacer finezas', de Carlos Patiño
- 'Antorcha brillante', de Juan Hidalgo
- 'Segadorcillos que al son de las hoces', de Sebastián Durón
- 'Marionas', de Lucas Ruiz de Ribayaz y Gaspar Sanz
- 'Duerme, rosa, descansa', de Sebastián Durón
- 'Luceros y flores, arded y lucid', de Juan Hidalgo
- 'Aunque en el pan del cielo', de Juan Hidalgo
- '¡Volcanes de amor...!', de Sebastián Durón
- 'Ay, cómo gime', de Juan Hidalgo