El francés Renaud Lavillenie (salto con garrocha) y Caterine Ibargüen (triple salto) iniciarán el sábado su andadura en la Liga de Diamante, en la segunda etapa de este año, en Shanghai, con el deseo de dejar atrás sus sinsabores de 2017.
El Mundial de Londres en agosto les dejó como dos de los grandes derrotados, sin conseguir los títulos mundiales, que fueron para el estadounidense Sam Kendricks y para la venezolana Yulimar Rojas, respectivamente.
Lavillenie, plusmarquista mundial (6,16 metros), tuvo que conformarse con el bronce en ese Mundial e Ibargüen con la plata.
El garrochista francés comenzó ya 2018 sacándose esa pequeña espina londinense, al vencer a Kendricks en el Mundial en pista cubierta de Birmingham, el pasado mes de marzo, y colgarse el oro.
Ibargüen, sin embargo, no estuvo en Birmingham, donde Yulimar Rojas fue también la campeona.
En Shanghai, en la segunda etapa de la Liga de Diamante 2018, pero la primera con el triple salto femenino en el programa, será justo al revés: Ibargüen estará en la pista, mientras que Rojas disputará este fin de semana la reunión de Guadalupe, donde quiere preparar los Juegos Suramericanos de Cochabamba (Bolivia), que comienzan a finales de este mes.
En la pista china, Ibargüen será la favorita, pese a que en la final de la Liga de Diamante 2017, en Bruselas, sólo pudo ser tercera, detrás de la kazaja Olga Rypakova y de Yulimar Rojas. Rypakova tampoco estará en Shanghai.
Para Lavillenie, esta reunión supone una nueva oportunidad para demostrar que los problemas físicos del pasado año quedaron atrás.
"Es el rey. Es el plusmarquista mundial y ha ganado siete veces la Liga de Diamante. Aprendo cada vez que me toca competir con él", dice sobre él Sam Kendricks.
Lavillenie se siente bien: "Ahora hago las cosas con normalidad. El año pasado, en espacio de nueve meses, me entrené el equivalente a dos meses y medio. Cuando estás mermado por las lesiones no puedes rendir bien", dijo a la AFP antes de viajar a China.
Gatlin, un año más
El saltador francés tenía el Mundial en sala como su prioridad en 2018 y ahora se fijó dos metas más: la Liga de Diamante y el Europeo al aire libre de Berlín en agosto.
"Estoy concentrado realmente en el Europeo, ya que desgraciadamente con el nuevo reglamento de la Liga de Diamante no sirve de nada disputar al máximo todas las etapas, simplemente basta con ganar la última", indica Lavillenie.
La Liga de Diamante, después de su reforma, se compone de 12 etapas clasificatorias que dan acceso a las dos finales y decisivas, los días 30 y 31 de agosto en Zúrich y Bruselas.
Otro centro de interés de la reunión de Shanghai serán los 100 metros, con el campeón mundial Justin Gatlin (36 años) frente a varios rivales destacados, entre ellos el canadiense André De Grasse, que todavía no recuperó su nivel previo a la lesión que le ha tenido nueve meses de baja, y el turco Ramil Guliyev, campeón mundial en 2017 en los 200 metros.
En la categoría femenina serán los 200 metros los que atraigan la atención, con la holandesa Daphne Schippers contra la marfileña Marie-Josée Tan Lou, que en la primera etapa de esta Liga de Diamante, la pasada semana en Doha, ya venció en los 100 metros.