Un renacido James Rodríguez, designado el mejor jugador de la Copa América, ha respondido con un gol y seis asistencias, llevando de la mano a un equipo que exhibe muy buenas figuras como el atacante Luis Díaz.
El capitán cafetero pasó del ostracismo en su club, el Sao Paulo, a convertirse en un gran director de orquesta tricolor.
Colombia de su lado disputó un muy buen torneo continental y estuvo a un paso de conquistar su segundo título de Copa América, tras el que ganó en casa en 2001, dirigido por un poco conocido Néstor Lorenzo, que además mantiene a su equipo en el tercer lugar de la clasificación sudamericana al Mundial de 2026.
Colombia, a la par de Argentina
De los dos finalistas hay uno que está marcando una era y no es una casualidad, dijo este domingo el seleccionador de Colombia, Néstor Lorenzo, al analizar la derrota 1-0 frente a Argentina en la final de la Copa América 2024 en Miami.
"De los dos finalistas hay uno que está marcando una era y no es una casualidad. Está marcando una era y que antes de esta era, perdió dos finales de Copa América y una final del mundo", dijo Lorenzo en rueda de prensa en el Hard Rock Stadium.
La Albiceleste se proclamó bicampeona de América al ganar 1-0 al combinado cafetero en tiempo extra con un gol de Lautaro Martínez, el goleador del torneo con cinco anotaciones, a los 112 minutos.
"No es fácil jugar una final para todos, los muchachos sintieron un poco el esfuerzo de todo el torneo, jugaron 6 partidos en 21 días y aclaro, todos los jugadores que fueron sustituidos, todos, salieron con calambres, algunos en las dos piernas, pero todos pidieron el cambio", aseguró el entrenador argentino.
Con la derrota, Colombia frenó su imbatibilidad en 28 partidos entre partidos oficiales y amistosos, 25 de ellos bajo el comando técnico de Lorenzo, en el banquillo cafetero desde mediados de 2022.
"Mientras Argentina está en un proceso espectacular, que ya no es una racha, sino una era, nosotros recién empezamos. Ojalá volvamos a jugar la final próxima y clasifiquemos al Mundial" norteamericano de 2026, señaló.
"Creo que hicimos un muy buen planteo, después se empezaron a dar situaciones también anómalas. (Los jugadores) calentaron, se enfriaron, calentaron otra vez, el tema del inicio (demorado 1 hora y 20 minutos por incidentes en el ingreso de los aficionados), 25 minutos de entre tiempo, cosas raras para los dos equipos", analizó.
"Yo dije que eso iba a repercutir en el físico y generalmente la tensión la siente más el que menos experiencia tiene en finales, y nos pasó factura", puntualizó el seleccionador cafetero.