¿El camino de Stranger Things deriva en Chernobyl? | El Nuevo Siglo
Foto cortesìa HBO
Domingo, 16 de Junio de 2019
Agencia Europapress

AMBIENTADA en la década de 1980, Stranger Things de Netflix regresará este verano con una tercera temporada ambientada en 1985. Una fecha que ha llamado la atención de los fans, que ya han lanzado una teoría vinculando Stranger Things con la catástrofe de Chernobyl, ocurrida en 1986.

En Reddit (un mapa interactivo de discusión), los usuarios sugieren que con la tercera temporada de Stranger Things comenzando a mediados de 1985, la serie podría adelantar hasta llegar a 1986, con una cuarta temporada que podría alinearse temporalmente con el accidente del 26 de abril de ese año.

Aunque la teoría de Reddit está limitada a la línea temporal, hay algunos detalles de la trama que sugieren que Chernobyl podría tener cierto impacto en la serie de Netflix. En Stranger Things, Eleven se crio en el Laboratorio Nacional de Hawkins, una instalación bajo el control del Departamento de Energía de Estados Unidos.

Los experimentos en el laboratorio abrieron la puerta al Mundo del Revés, por lo que no es imposible que los científicos soviéticos pudieran estar haciendo el mismo tipo de pruebas, que podrían traer como consecuencia el desastre de Chernobyl en el mundo ficticio de la serie.

Es una posibilidad intrigante, pero lo más probable es que si Stranger Things llega a 1986 en su línea temporal, el desastre solo se mencionará como parte del contexto. Esta hipótesis ha surgido a raíz del enorme éxito de Chernobyl, la miniserie de HBO que narra el desastre. La ficción protagonizada por Jared Harris, Stellan Skarsgard y Emily Watson se ha ganado tanto al público como a la crítica, obteniendo la mayor calificación en la web especializada IMDb y desbancando a Juego de Tronos como la mejor serie.

Por su parte, Stranger Things regresará el próximo 4 de julio, con una nueva entrega cargada de nostalgia y referencias a películas de los 80.

No habrá segunda temporada

La exitosa Chernobyl, miniserie de cinco capítulos emitida en HBO, no tendrá una segunda temporada, tal y como era de esperar y ha confirmado su creador Craig Mazin. Desde el principio, la narrativa de esta trágica historia estaba limitada a un número cerrado de episodios. Su creciente y rápida popularidad puso sobre la mesa una probable secuela, pero su máximo responsable ha descartado totalmente esa posibilidad.

Citando una de las entrevistas que él mismo ha concedido, y como respuesta a si la historia de Chernobyl continuará en una segunda temporada, Craig Mazin ha zanjado rápidamente el debate: “Con todo respeto a Decider, pero la respuesta a la pregunta del titular ‘¿Habrá una segunda temporada de Chernobyl?’ es no”.

Mazin ha citado en el tuit aclaratorio la entrevista concedida a Decider, en la que planteó el argumento de una hipotética segunda temporada de Chernobyl, sin dar nada por sentado: “Si existiera una segunda temporada, probablemente el argumento estaría más relacionado con otros aspectos de la vida en la antigua Unión Soviética, porque es algo que me fascina y que es emocionante revivir”.

En todo caso, Mazin sí especuló con la posibilidad de dar continuidad a la serie, aunque no con una segunda temporada propiamente dicha, sino como un una antología de catástrofes nucleares: “Si me presento ante HBO y les digo: ‘Quiero hacer otra temporada de Chernobyl, pero esta vez va a estar centrada en otra gran tragedia’, con independencia de que fuera Bhopal o Fukushima o algo parecido, imagino que al menos despertaría su interés”.

Fin de la miniserie

El final de Chernobyl de HBO se estrenó el 3 de junio y, para sorpresa de los fans, la serie terminó volviendo al principio de la historia, para mostrar con mayor detalle lo que sucedió la noche del accidente. La miniserie presenta una narración inusual, retrocediendo en el tiempo, una decisión que el creador Craig Mazin ha explicado.

En una entrevista con Vox.com sobre la serie, Mazin explicó que tenía más sentido para él contar la historia al revés, dejar que el público viera el horror, la tragedia y el impacto del desastre antes de analizar cómo sucedió todo y las decisiones que tomaron las personas que estuvieron allí.

“Lo normal hubiera sido comenzar con ese día y mostrarles a las personas, conocerlos yendo a trabajar y riéndose de su noche anterior. Y luego mostrarles haciendo una prueba, todo va mal, y termina con una explosión. Eso habría sido el primer episodio”, relató.

Pero Mazin cambió de idea. “Pensé, ‘eh, comencemos con la explosión y vayamos desde allí. Es más interesante para mí y, además, no estoy seguro de que realmente me importe esta gente, lo que están haciendo y las decisiones que están tomando si no tengo el contexto para ello, que es este desastre”.

El creador agregó que, de esta manera, es más fácil que el espectador realmente examine el desastre, y tal vez aprenda de él. “Así que este es el desenlace. Es en parte un drama, pero también una investigación científica”, dijo. “Y quería que la gente viera que estas cosas no suceden porque Dios lo quiso. No sucede debido a la mala suerte. No sucede porque estabas condenado o por el destino. Ocurre debido a la ciencia. Hechos. Y si sucede debido a la ciencia, eso significa que si prestamos atención a la ciencia, podemos evitar que suceda”, sentenció.