Medio ambiente y salud pública | El Nuevo Siglo
Foto cortesía El Heraqldo
Sábado, 15 de Junio de 2019
Alvaro Sánchez

AL  hablar sobre el tema ambiental no podemos perder de vista que  está directamente e internamente relacionado con la salud de los humanos en particular y de todos los seres vivos en general. A manera de ejemplos cotidianos podemos analizar; la ingestión de residuos contaminantes o infectados en nuestros alimentos, los problemas o enfermedades respiratorias derivadas de la calidad del aire, o el ruido de las grandes ciudades que deteriora nuestros sistemas auditivos.

A pesar de lo mencionado anteriormente, la relación causa efecto que se determina entre los factores ambientales y la salud, es muy difícil de determinar; esto hace que un estudio al respecto requiera de múltiples profesionales especializados en diferentes áreas del conocimiento, realizando un trabajo, útil pero de alta complejidad, que ayudará en la preservación de nuestra salud.

Aunque en muchas ocasiones la relación entre unos factores y otros es directa y evidente en otras varias no, de manera tal que lo más prudente sería utilizar los principios básicos de prevención; sin embargo en la mayoría de los casos estos principios no se reflejan en nuestras actividades cotidianas.

Desde hace algunas décadas nos venimos acostumbrando a ver, oír y tomar determinadas actitudes que vemos normales, siendo estas causantes de efectos negativos para nuestra salud; son excesivas las acciones humanas que están atacando el ambiente de una manera irreversible.

La humanidad contemporánea comprueba cómo se desarrollan la técnica y el progreso, al mismo tiempo que ve un progresivo deterioro del ambiente; el problema ambiental está profundamente relacionado con el vínculo que tienen los hombres con su hábitat y depende también de la relación de los hombres entre sí. El factor demográfico y el uso y consumo de todos los recursos naturales e industrializados que utilizamos los humanos a todo lo largo de nuestra vida, además de la infraestructura social, económica y cultural que esto implica, son factores determinantes en la emisión de contaminantes, afectación del ambiente y la salud del hombre.

Creo que para ninguno de nosotros es una novedad el hecho de que el ambiente deteriorado enferme, el problema es que cada vez está más deteriorado el ambiente y por lo tanto la salud colectiva es más débil, hace alguno años la salud se relacionaba con condiciones específicas como los efectos de la contaminación nuclear o ciertas profesiones peligrosas, y se creía que la ciencia resolvería cualquier problema, ahora, la capa de ozono, la gestión de residuos, la calidad del agua, la calidad del aire y en general los pasivos ambientales que el ser humano todavía no sabe manejar, sumados a la pobreza y la marginación, afectan notoriamente la salud pública.

Ya decía Al Gore que “no existe ecosistema que resista la pobreza”, pobreza que podría definirse como; la falta de recursos financieros, técnicos y de gestión para suministrar infraestructura y servicios básicos. La mencionada pobreza tiene un costo importante en términos de la exposición de la gente a situaciones riesgosas para la salud; la escasez en lo concerniente al suministro de agua, a los servicios de saneamiento básico, al tratamiento de los desechos sólidos y a la vivienda, constituye una preocupación primordial.

La salud debería ser una meta y un requisito primordial del desarrollo, los individuos sanos son más productivos, y un nivel elevado de salud en la comunidad evita el tener que gastar la riqueza social para hacer frente a enfermedades, dolencias y alteraciones sociales. El estado debería interesarse más por el ambiente y disminuir costos en los sistemas de salud, aumentando de paso la capacidad productiva del país; quizá una cuantiosa inversión en prevención ambiental sea mucho más económica que la atención del deterioro que significa para la salud pública el no realizarla.

 

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@alvaro080255