LA SEGURIDAD no es la prioridad de la Alcaldía de Carlos Fernando Galán, según afirmó el concejal Julián Uscátegui. A su juicio, así lo refleja el proyecto de presupuesto, que cursa en el Concejo de Bogotá, por cerca de 38 billones de pesos, en el cual, presuntamente, se asigna un rubro insuficiente para la lucha contra el crimen en la ciudad. Tan solo el 2,21% de todo el presupuesto de la ciudad irá para este sector mientras las cifras de inseguridad y violencia aumentan de sobremanera.
“El presupuesto de la ciudad para el 2025 no se compadece de la realidad que viven los bogotanos día a día. Es inconcebible que siendo la inseguridad la preocupación más grande que hoy tienen los bogotanos, la alcaldía destine tan solo el 2,21% del presupuesto para combatirla”, aseguró el concejal Julián Uscátegui.
Durante los primeros 11 meses del año, en Bogotá, se han presentado más de 1.043 homicidios, siendo esta la cifra más alta de los últimos 8 años en la capital, 613 por arma de fuego, 19.056 casos reportados de lesiones personales, 1942 extorsiones y más de 507 casos de sicariato; cifras alarmantes que ameritan una mayor inversión en este sector.
“Recuperar la seguridad de Bogotá requiere un presupuesto robusto para mantener y adquirir vehículos, tecnología y personal. Sin plata es muy difícil lograrlo. Esto demuestra que no hay un verdadero compromiso de la administración con la seguridad de la ciudad”, enfatizó el concejal Uscátegui.
No solo las cifras de criminalidad han aumentado, sino que las capacidades operativas de la Policía Metropolitana de Bogotá (MEBOG) han disminuido. La ciudad tiene un déficit de pie de fuerza cercano a los 10.000 policías y 1 de cada 3 automóviles de la institución está fuera de servicio, es decir el 33,3% del parque automotor de la Mebog no funciona, según advirtió el cabildante.
Ponencia negativa
En su calidad de ponente, la concejala Ana Teresa Bernal presentó ponencia negativa al Proyecto de Acuerdo No. 842 de 2024, en la Comisión de Hacienda y Crédito Público, el cual define el Presupuesto Anual de Rentas e Ingresos y de Gastos e Inversiones de Bogotá para la vigencia fiscal del 2025 que busca aprobar el presupuesto anual más alto en la historia de la ciudad, con un monto estimado en 38,4 billones de pesos. Bernal expresó profundas preocupaciones respecto a la estructuración del presupuesto y sus implicaciones para el desarrollo de Bogotá, subrayando la necesidad de mayor transparencia, planeación estratégica y articulación con las políticas públicas.
“Hoy no estamos discutiendo cualquier cosa; estamos hablando de 38,4 billones de pesos que se destinarán a gastos de funcionamiento, servicio de la deuda e inversión. Sin embargo, el proceso de elaboración de este presupuesto no refleja un análisis integral de las condiciones macroeconómicas actuales, tanto a nivel global como nacional”, señaló Bernal al iniciar su intervención.
La concejala destacó la distribución del presupuesto en tres categorías principales: 5,1 billones de pesos para gastos de funcionamiento, 2 billones para el servicio de la deuda y 31,2 billones para inversión. Sin embargo, expresó serias preocupaciones sobre el incremento acelerado en el uso de la deuda y la proyección de ingresos por sanciones a los ciudadanos.
Según Bernal, el presupuesto proyecta un uso de deuda que alcanzará 5,3 billones de pesos en 2025, superando los niveles aprobados en el reciente cupo de endeudamiento. Esto representa un crecimiento del 162% en las proyecciones, lo que comprometerá las finanzas de la ciudad a largo plazo. “El margen de maniobra para nuevos proyectos se verá reducido, dejando a la ciudad sin capacidad de inversión significativa más allá del 2029”, advirtió.