El primer caso de asesinato de un líder social se registró ayer en el departamento de Boyacá, con lo que la cifra de víctimas fatales en lo corrido de este año en el país se acerca a las 100 y desde enero de 2016 a la fecha, a las 330.

El nuevo caso ocurrió justo unas horas después de que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condenara los homicidios de los defensores de derechos humanos y solicitara al Estado tomar medidas urgentes para proteger y brindar garantías a las personas y poblaciones en estado de vulnerabilidad.

Según la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Colombia (Oacnudh), entre enero y junio de este año se habrían producido al menos 90 asesinatos y que los departamento más afectados son el Cauca, Antioquia, Norte de Santander, Nariño, Valle del Cauca y Chocó.

La Comisión aseguró en su misiva que la violencia contra los defensores de derechos humanos no solo afecta las garantías del ser humano, sino que también atenta con el rol fundamental que cumplen en la sociedad generando un rol amedrentador y disuasivo de la labor de defensa.

“Dicha investigación además debe ser emprendida con debida diligencia, de manera exhaustiva, seria e imparcial. La Comisión urge al Estado a redoblar sus esfuerzos para hacer frente a la situación de impunidad respecto de los crímenes cometidos contra personas defensoras de derechos humanos en el país”, dijo la CIDH.

El caso reportado ayer fue confirmado por el comandante de la Policía Boyacá, coronel Juan Darío Rodríguez, quien indicó que la víctima fue identificada como Horacio Triana Parra, presidente de la Junta de Acción Comunal de la vereda el Carmen del municipio de Otanche.

Según dijo a Caracol Radio el oficial, las circunstancias del asesinato son materia de investigación pero lo que por ahora se sabe es que Triana Parra, habría recibido tres impactos de arma de fuego.

El exdiputado y líder del occidente de Boyacá, Jhonatan Sánchez, dijo que “me solidarizo con su familia. Que lo único que matemos en nuestro Boyacá sea la pobreza, la injusticia, el hambre. Es hora de parar esta ola violenta! Descanse en paz”.

Triana no había reportado amenazas en su contra y en cambio era un líder reconocido y querido por la comunidad, que se dedicaba solamente a las labores del campo y su actividad no tenía relación alguna con la minería o las esmeraldas.

“Esta hombre salió de su casa al campo para ir a recolectar productos agrícolas en su propiedad. Minutos después el padre de la víctima escuchó varias detonaciones o disparos. Enseguida, salió a buscarlo y lo encontró tendido en el suelo en medio de un cultivo. Los familiares del líder llamaron a nuestras unidades para asistir el caso, e inmediatamente iniciaron las labores para esclarecer el homicidio”, explicó el coronel Rodríguez.

El líder tenía 34 años, había aspirado hace 3 años a ser concejal del municipio de Otanche y pertenecía al partido Conservador. Además era reconocido por liderar acciones sociales en protección de la Serranía de las Quinchas.

Al conocer el hecho, desde distintos sectores se invitó a realizar una nueva velatón para protestar por el asesinato de líderes sociales en el país, tal como ya lo hicieron el pasado 5 de julio.

También ayer, la electa vicepresidenta de la República, Marta Lucía Ramírez, a través de su cuenta en Twitter, pidió a los ministros del Interior y de Defensa la lista de los líderes con mayor riesgo de ser asesinados y cuestionó si estos cuentan con medidas de protección: “El país debe rechazar asesinatos de líderes sociales. Tienen el Ministro del interior y el de Defensa y el Defensor del Pueblo lista de los de mayor riesgo? Qué medidas de protección han tomado para ellos? QEPD Horacio Triana asesinado  en Otanche, Boyacá”.