Irregularidades como concentración de contratos (un solo contratista llega a tener 24 por casi $8.000 millones), constantes adiciones y prórrogas de los contratos, prevalencia de la contratación directa, bajísima ejecución presupuestal y obras con problemas en sus estudios y diseños, fueron encontradas por la Contraloría en Corporaciones Autónomas.
Los hallazgos se dieron luego de que el ente de control hiciera una auditoría a las Corporaciones más grandes del país, que manejaron recursos por casi cuatro billones de pesos en 2017.
Las irregularidades fueron encontradas en diez entidades, entre las que se encuentran la CVC, CORTOLIMA, CORPOCESAR, la CRC y la CARDER.
La alerta también está en algunas de las obras que se desarrolla como parte del Megaproyecto Río Bogotá (la PTAR Salitre Fase I y la PTAR Canoas), las cuales no cumplen con los requerimientos técnicos y contractuales, según el organismo de control.