Estamos avanzando todos los días hacia el pico del coronavirus y, a medida que esta fecha se acerca, la suma de contagiados es mayor. Hoy amanecemos con una cifra de más de 17.000 contagiados y más de 730 muertos por causa del Covid-19.

Es decir que, al día se establecen más de 720 nuevos casos y por lo tanto la cifra aumenta a diario entre un 4% y 5%. Aunque el porcentaje parece aumentar más lentamente, los números crecen de forma exponencial y es muy preocupante ver las cifras todos los días con más contagiados.

Esto no quiere decir que el Gobierno no haya hecho su mejor esfuerzo para que el virus se propague lo menos posible, a su vez procurando cuidar la economía del país. Lo que esto muestra es que el virus tiene una capacidad de extenderse muy grande y es por eso que debemos tomar todas las precauciones posibles para detenerlo.

Con inteligencia el Gobierno decretó el aislamiento obligatorio y el cierre de todas las actividades, excepto de las estrictamente necesarias. Estas medidas indudablemente tendrían como consecuencia un golpe económico para las empresas que no han podido volver a operar, así como para los empleados o trabajadores independientes que se han visto más afectados. El Gobierno ha otorgado ayudas y beneficios para los más necesitados, tanto personas como entidades, pero la situación sigue siendo difícil.

El desempleo ha crecido, el crecimiento económico se ha golpeado duramente y las cifras esperadas ya no serán positivas: muchos sectores de la economía del país están muy golpeados, incluyendo el turismo, la industria hotelera, los restaurantes y establecimientos de ocio, la industria aeronáutica y sus actividades asociadas, entre otras muchas otras.

El Gobierno está siendo estratégico en preparar al país para el incremento en los contagios que iniciaría cuando gradualmente reabra la economía, aumentando la capacidad de atención hospitalaria y las herramientas necesarias para controlar el contagio.

Hoy en día las actividades y áreas de la economía que están volviendo a operar lo hacen con el cumplimento de protocolos establecidos para evitar la propagación descontrolada. Muchos países, incluso con mayor fuerza que en el caso colombiano, se encuentran en el mismo dilema y combatiendo esta misma lucha.

Lo que sigue no será fácil pero ya no depende sólo de las acciones de Gobierno sino de la conducta de todos nosotros. Si no tenemos conciencia que debemos guardar unos protocolos y nos cuidamos con responsabilidad, con máximo compromiso, no podremos salir airosos de esta pandemia.

Mi llamado es al compromiso personal y de todos, para cumplir los protocolos sobre los cuales ya se ha hecho la suficiente divulgación, pero lo más importante es que cada cual sepa que tenemos que cambiar las costumbres y, mientras se descubre en el mundo la vacuna, convivir con el coronavirus. Si no actuamos a conciencia y mucha responsabilidad perderemos todo lo hecho.

Serán días muy difíciles los que se acercan pero solo con el compromiso de todos podremos seguir adelante.

Cuidémonos y seamos conscientes que exclusivamente de nosotros mismos dependen nuestras vidas y la de los demás.