GUILLERMO FRANCO CAMACHO | El Nuevo Siglo
Domingo, 3 de Noviembre de 2013

Incógnitas

 

La reciente convención de Uribe Centro Democrático eligió candidato para la Presidencia de la República, correspondiente al período 2014-2018, a Óscar Iván Zuluaga en contraste con Carlos Holmes Trujillo y  Francisco Santos Calderón, conocido como “Pacho”, o sea, se ha despejado la segunda incógnita; la primera se aclaró el 7 de agosto de 2010 y, en realidad, antes con motivo de las elecciones pertinentes al lapso 2010-2014 y el afortunado es Juan Manuel Santos Calderón. Lo último es corolariode la convicción, con carácter de axioma, de aspirar todo Presidente de Colombia a la reelección inmediata a menos que ocurra algún percance irreparable.

Se aprovecha la ocasión para señalar el respaldo personal a la solución mexicana: ejercicio presidencial de seis años sin repetición.

Hubo dos opciones para la escogencia comentada: convención o consulta popular a través de encuestas; Pacho estaba al frente con el segundo procedimiento. Sin embargo, surgió la siguiente observación adversa: Juan Manuel Santos comenzaría su campaña a fines del presente mes  y el candidato de Uribe Centro Democrático solo el año entrante. En consecuencia era indispensable realizar la selección de inmediato, en el curso de la convención, y así habría tiempo para la preparación competitiva del candidato del Centro. Mauricio Vargas está en desacuerdo y se expone un ensayo de racionalización: Zuluaga ha de superar una etapa inicial consistente en igualar a Pacho y avanzar luego hasta sobrepasar al actual Presidente, es decir, el esfuerzo de su oponente habría sido comparativamente menor. ¿Se le hizo un favor a Juan Manuel Santos? En todo caso, como dijo Julio César: “la suerte está echada”. Puede ser que El Tiempo,o algún otro medio,clarifique la situación algún día, pero el tiempo será determinante.

De gran interés el reportaje concedido por el candidato Zuluaga a María Isabel Rueda; sin embargo, ambas partes omitieron un tema trascendental tanto para el año en curso como el  próximo: el efecto fiscal de los subsidios por productos derivados de los paros agrarios, lo que no debiera ser permanente. Los campesinos estiman la ganancia deseable, conocen sus costos y negocian el volumen de la ayuda gubernamental. Es conveniente que se divulguen las perspectivas. ¿Habrá déficit? ¿Creciente o decreciente? ¿Qué medidas se han adoptado o se contemplan? Se entiende que se mantendrían el impuesto del 4x1000 y el del patrimonio.