La batalla del Carabobo | El Nuevo Siglo
Domingo, 27 de Junio de 2021

* Una gesta decisiva para la Independencia

* La tenacidad y genialidad del Libertador

 

Con diversos eventos oficiales y académicos se conmemora por estos días el triunfo del Libertador Simón Bolívar en la Batalla de Carabobo, el 24 de junio de 1821. Es conocido que desde el punto de vista de la estrategia militar general esa confrontación  entre las fuerzas americanas hizo parte de lo que comenzó como una guerra civil y se convirtió en guerra de liberación e independencia.

En ambos bandos se encontraban hermanos, familiares y amigos que estaban enfrentados, dando muestras en la Capitanía de Venezuela de un apoyo fervoroso al Rey, al punto de conseguir los llamados realistas, durante la Primera República de Venezuela, derrotar al gobierno y las fuerzas de Francisco de Miranda. 

Por supuesto, en sus inicios la gesta de Independencia atrae más a una parte importante e innovadora de las elites criollas, que buscaban aprovechar la invasión de España por Napoleón y consideraban llegado el momento de alcanzar la autonomía. Al recibir los realistas el apoyo popular en nuestra región, estando acéfalo el gobierno peninsular o en manos de Napoleón o su hermano, habría sido relativamente fácil conseguir la independencia hispanoamericana, lo que no se da por la tendencia de los sectores populares y el clero a mantener la monarquía. En especial por cuanto en el Nuevo Mundo no se tenía la menor experiencia democrática y los caciques y brujos hacían su voluntad. Siendo natural que se aceptara el despotismo de la época como algo natural.  

Así que cuando cae la primera República de Venezuela y el coronel Simón Bolívar se dirige a Cartagena, para ofrecer sus servicios a la Nueva Granada, lleva consigo la carga dolorosa de la trágica experiencia de ser derrotado más por los suyos que por las tropas realistas. Bolívar revisa su ideario político y plantea en El Manifiesto de Cartagena servir con su espada y luces a la independencia de la Nueva Granada a cambio del apoyo local a la liberación de Venezuela. El prócer logró el respaldo del presidente de la Provincias Unidas, Camilo Torres, que lo encarga de capitanear las tropas que deben tomarse Bogotá para incorporarlas a su gobierno. El triunfo de Bolívar en la toma de la capital determina que pueda dirigir la Campaña Admirable y con un puñado de voluntarios, en su mayoría granadinos, liberar Venezuela. 

Sin embargo, el pueblo venezolano seguía fiel al Rey, en tanto surge el temible realista Boves, que acaudilla a los antiguos esclavos y el pueblo contra los mantuanos, dando muestras de una fiereza y potencia bélica que poco a poco y en sucesivas y sangrientas batallas, sepultan las ambiciones independentistas locales y facilitan el retorno al antiguo régimen, bajo el gobierno realista y las tropas de Morillo. Por eso, los guerreros de Boves derrotan a Bolívar y se toman Venezuela. 

Tras ello es cuando el indomable caraqueño da muestras de su voluntad, habilidad política y capacidad de resurgir y conseguir apoyo externo para sus propuestas, como el valioso y generoso respaldo de Petion en Haití. Ofrece la libertad a los esclavos que se sumen a su cauda. Lo mismo que se convierte en el más elocuente defensor de la democracia y la libertad de los pueblos. Proclama, entonces, su consigna de “Liberación o muerte”. Es así como retorna con armas y organiza la Legión Británica, con los veteranos guerreros que había derrotado a Napoleón. También, con el apoyo de los granadinos, organiza sus tropas y se lanza a la campaña para liberar Venezuela. En la crucial Batalla de Carabobo se define el destino de esa nación y la Nueva Granada. Allí les pide a los granadinos que luchen con toda su potencia, lo mismo que a los venezolanos e ingleses. Si se hubiese perdido esa confrontación, se habría hundido por varios años o décadas la causa de la libertad.

Sin embargo, el  genio estratégico de Bolívar y su don de mando natural consiguen resquebrajar la voluntad del enemigo. Los granadinos luchan con fiereza y mueren como héroes bajo el mando de Ambrosio Plaza. Los legionarios ingleses reciben la orden de Bolívar de atacar al enemigo y uno a uno sus jefes caen bajo disparos de los realistas, lo mismo que varios héroes venezolanos también pierden la vida bajo las órdenes del indómito Páez… En fin, una gesta bélica inigualable.

Como se ve, la Batalla de Carabobo demostró que el Libertador tenía la razón: la suerte de Venezuela y la de la Nueva Granada están ligadas y por eso, al llegar a Caracas, proclamó la unión de los dos países en la Gran Colombia.