HENRY BRADFORD | El Nuevo Siglo
Jueves, 19 de Diciembre de 2013

TLC con Unión Europea

 

La  semana pasada tuvimos, por primera vez en la historia de Colombia, la visita del presidente de la Unión Europea (UE), José Manuel Durão Barroso; vino a manifestar el interés que hay en desarrollar acuerdos comerciales con nuestro país y a darle un espaldarazo al proceso de paz; durante su visita, hizo una importante donación para los niños víctimas del conflicto armado. Hoy me centraré en el primer punto: el futuro del acuerdo comercial.

Recordemos que después de seis años de negociaciones, el pasado mes de agosto entró en vigencia el Tratado de Libre Comercio (TLC) con la UE, acuerdo que nos abre un mercado de más de 500 millones de habitantes con un alto poder adquisitivo. Desde hace muchos años hemos tenido buenas relaciones comerciales con algunos de los países europeos, pero luego de la entrada en vigor de este acuerdo comercial, los empresarios colombianos tendremos la posibilidad de intercambiar bienes con los 28 países pertenecientes a la UE, lo que nos permitirá un mayor crecimiento económico, más inversión, generación de empleo, mejor calidad de vida, incremento del comercio exterior, etc. Dependemos de nuestra capacidad empresarial para aprovechar de una manera sustantiva el acceso a uno de los mercados más grandes, dinámicos, desarrollados y ricos del mundo; podremos incrementar el valor de nuestras exportaciones a dicho bloque económico, así como aumentar/diversificar los productos de diferentes sectores que se podrán exportar. En la actualidad, nuestras exportaciones a la UE están concentradas en petróleo y sus derivados, café, flores y algunas frutas. Europa es uno los principales importadores de productos agrícolas del mundo y ése es uno de los sectores que como país debemos aprovechar; evidentemente es un público exigente, pero Colombia puede producir bajo estándares internacionales de calidad durante todo el año, para llegar a convertirnos en proveedores importantes de la UE.

Además de los productos agrícolas, la UE importa muchas manufacturas provenientes de todas partes del mundo; nuevamente en este sentido, dependemos  de lograr tener precios competitivos, buenas calidades y diversidad de productos finales para así entrar a competir en un mercado de alto poder adquisitivo. Es una gran oportunidad para nuestras Pymes, si logran generar productos innovadores que cumplan con las exigencias y regulaciones impuestas por Europa, pero principalmente si satisfacen las necesidades y requerimientos de los consumidores europeos. El principal riesgo es no aprovechar esta oportunidad y quedarnos de brazos cruzados sin inyectarle valor a nuestros productos, lo que nos haría poco competitivos en este mercado tan exigente.

Desde el punto de vista de las empresas europeas, el acuerdo es de gran importancia porque le da acceso a una de las economías más dinámicas y de alto potencial de la región, con una democracia estable. Colombia se convierte en un socio estratégico de comercio e inversión para la UE; podrán participar activamente, con su vasto conocimiento, en los proyectos de desarrollo y modernización de nuestra infraestructura.

Para terminar considero que sería muy positivo dentro del presente panorama, que se confirme la eliminación de la visa Schengen para los colombianos.