Las redes 5G se han convertido en todo un escándalo. Estados Unidos, Inglaterra, Canada y Nueva Zelanda, han prohibido que la empresa china Huawei tenga las licitaciones para la implementación de la nueva tecnología. El gigante chino, que a nivel mundial se coloca en el segundo lugar de proveedores de teléfonos inteligentes, ha sido acusado. Acusado de posible agente al servicio del Partido Comunista de China. Un agente de espionaje, tal como los que se encuentran en las novelas de ficción de Ian Fleming: 007, James Bond. Así las cosas, Huawei es un riesgo para Occidente, pues evidentemente tendrían acceso a toda la información de los países que permitieran que estos fueran los proveedores de las nuevas redes de tecnología 5G.
El fundador de Huawei, Ren Zhengfei, miembro del Partido Comunista y ex oficial del Ejército chino, no causa confianza a Estados Unidos ni a Europa. Trump advirtió a Canadá y a Inglaterra que no permitieran entrar a Huawei dentro del consorcio a cargo de la nueva tecnología. Tener el control de esta red del futuro, que permite velocidades nunca antes vistas, conllevaría a dejar incluso, el manejo de las centrales eléctricas de un Estado. Reino Unido había decidido que Huawei sería una de las empresas encargadas de la implementación de esta entrega al futuro de la interconectividad.
Sin embargo, por la advertencia de EE.UU, decidió revertir la decisión. El argumento de base de la Nación americana es que China tiene una ley que obligaría a cooperar a las empresas “privadas” si el gobierno así lo requiriera. La Ley de Inteligencia Nacional de China hostigaría eventualmente a Huawei para que le otorgara información sobre cualquier tema de interés que la plataforma de las 5G cubriese.
La ciberseguridad y la protección de privacidad del usuario es lo que según Estados Unidos estaría en jaque si una compañía china como Huawei administrará. Más, la compañía asiática arguye que nunca harían algo que afectara a una Nación o individuo en materia de seguridad informática. Inglaterra ahora tendrá que otorgar a otra empresa la concesión de las redes 5G. En materia de teléfonos móviles no hay ninguna restricción, sin embargo, se advierte que la información podría ser entregada al gobierno chino.
Estados Unidos fue el primero en prohibir a Huawei, en materia relacionada con las 5G. Además, no tardó en persuadir a sus países aliados a que procediesen de igual forma. La preocupación de Norteamérica y luego de países como Inglaterra, Canadá, Japón y Alemania no es infundada. Analistas del tema han venido advirtiéndolo. Controlar las redes podría convertirse en un nuevo poder. El dominio de ésta, la realidad virtual que han logrado crear el internet y el mundo de las telecomunicaciones, es a día de hoy todo un poder. Político, militar, social y económico.
Las otras empresas que ofrecen la nueva tecnología, que ya es un hecho, son Ericsson, Nokia y Samsung, etc. La nueva tecnología 5G es la entrada al futuro, así que debería ser un tema bastante controlado. Además quien controle esta tecnología se convertiría en el “Big Brother”, esto, en lenguaje Orwelliano.
@davidrosenthaal