Negros borrados de la historia
Cada vez que leo ciertos libros y las informaciones que se cuelgan en algunos portales de Internet de movimientos de negritudes sobre la historia de los negros más sobresalientes en Colombia, me causa asombro la superficialidad y el desconocimiento que tienen determinados líderes negros sobre sus corraciales más importantes.
Una de sus más protuberantes contradicciones, tiene que ver con las exaltaciones que hacen de los exministros de origen chocoano Adán Arriaga Andrade, Manuel Mosquera Garcés, Eliseo Arango y el excontralor Sergio Abadía Arango al señalarlos, entre sus grandes iconos, cuando estos personajes durante sus vidas no se consideraron negros.
Perteneciente al llamado grupo de afros vergonzantes, cuyo más caracterizado exponente en la actualidad es el exfiscal Alfonso Gómez Méndez. Igualmente han caído en los mismos errores en exaltar personajes que no se consideraron negros e ignorar otros que sí se han considerado y que han tenido mayor trascendencia en la historia nacional que muchos de los que glorifican como sus líderes prominentes, pero que tristemente han sido borrados de la historia oficial y de las que escriben determinados defensores de la causa negra.
Lo polémico del asunto no es el simple desconocimiento que tienen ciertos defensores de las reivindicaciones negras sobre los negros más sobresalientes, sino las controvertidas selecciones que hacen por interés político y sesgos ideológicos de una serie de políticos, escritores, músicos, deportistas y personajes de la farándula, algunos sin méritos para figurar entre los más sobresalientes.
Por eso se habla poco de la historia de Pedro de Lerna, uno de los pocos conquistadores negros que llegaron a la Nueva Granada, de la vida y obra de Salvador Rizo, uno de los pintores más importantes del siglo XIX, primer pintor, Secretario y albacea del Sabio Mutis en la Expedición Botánica. Nada se dice acerca de la historia de Pío Mosquera, en la Expedición Botánica, el descubridor de las propiedades del bejuco el Guaco para la cura de las mordedoras de culebras. Igual acontece con la historia del capitán Agustín Martín y el coronel Leonado Infante, oficial negro de origen venezolano que luchó por la independencia nacional. Tampoco se valora el papel en la Comisión Corográfica de Miguel Mosquera y José del Carmen Carrascal, hombre de confianza de Agustín Codazzi.
Se desconoce la historia de la negra Francisca, una prospera comerciante de Guaduas que suministraba cargueros, arrieros y cabalgadura a los viajeros en la ruta del camino Honda - Bogotá. Existen escasas referencias históricas sobre el capitán Francisco Villa, edecán del general José María Córdoba, el ingeniero y novelista Manuel Baena, el arquitecto afroamericano Paul Williams, arquitecto Camilo Mayo Caicedo, el filósofo Rafael Carrillo Luque y físico Benjamín Hidalgo. Sigue siendo un personaje anónimo el general Ramón E. Marín, un negro que fue determinante para los intereses del partido Liberal en Tolima y Caldas, en la guerra de 1885 y en la de los Mil Días. La lista es larga de personajes negros que han jugado y juegan papeles estelares en la vida nacional y en las regiones, pero han sido esfumados de la historia colombiana.