La semana pasada conocimos una muy buena noticia para las personas que trabajan en la industria de contenido audiovisual y para los que nos gusta ver lo nuestro. A partir de ahora, y gracias a los esfuerzos de una norma que propuse en el Plan Nacional de Desarrollo y que ya salió reglamentada, todas las plataformas de video bajo demanda deberán disponer, para los usuarios en Colombia, de una sección fácilmente accesible en la que se incluyan las obras audiovisuales de origen nacional.

Esta medida aplicará a plataformas como Netflix, Amazon Prime, Claro Video, HBO Go, entre otras. Son cerca de 15 plataformas que hoy prestan sus servicios en Colombia y que tendrán nueve meses para crear una sección exclusiva que destaque el contenido colombiano para que se visibilice fácilmente y se promocione, tal como sucede hoy con producciones de Estados Unidos, España, México y otros países.

Y sí quiero ser muy clara con aquellos libertarios que ante este anuncio se han rasgado las vestiduras y distorsionado la información. No es una cuota de pantalla. Nosotros no vamos a obligar a las plataformas a comprar contenido colombiano, ni a los usuarios a ver contenido colombiano, pero estamos seguros que en la medida en que se promocione y se vea cada vez más, va a haber más gente que lo quiere comprar y lo quiere ver.

Es maravilloso no solamente por esa calidad del contenido colombiano que cada vez mejora más, sino porque hay 24.000 empresas, muchas de ellas nuevas, que hacen parte del sector audiovisual, entre ellas están las que se dedican al cine, televisión, publicidad y entretenimiento. Es una industria que aporta cerca del 3.2% del PIB y genera 539.000 empleos entre directos e indirectos.

Y es que Colombia tiene todo para ser protagonista en el mercado de América Latina. Según el Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (MinTIC), nuestro país es el tercer mercado más grande de la región por población y  el cuarto con más suscriptores con (12.8 millones). Se calcula que en tres años los ingresos regionales para las plataformas de video bajo demanda alcanzarían 6,43 mil millones de dólares al año. El 83% procederá de los cinco mercados principales: México, Brasil, Colombia, Argentina y Puerto Rico.

Cifras de la Comisión de Regulación de Comunicaciones (CRC) señalan que cerca del 42% de los colombianos son suscriptores de plataformas digitales de video bajo demanda. Esta tendencia está en aumento y se ha convertido en parte de la oferta de producciones audiovisuales. Se trata de una medida que nos ayuda a pararnos mejor en la cancha de una industria que está en acelerado crecimiento.

Me alegra que en medio de una coyuntura económica compleja como la que atraviesa la industria audiovisual colombiana por cuenta de la pandemia, podamos darle una buena noticia. Es una medida que cobijará a las obras con participación colombiana técnica, artística o de capital superior al 51%, según quedó reglamentado en la norma.

Una oportunidad para visibilizar las producciones colombianas: ganan libretistas, actores, directores, técnicos. Gana la industria nacional.