Cuando se publique este artículo, seguramente ya muchos habremos cumplido dos y tres semanas en cuarentena y, aun así, desafortunadamente el número de contagiados por el Covid-19 superará los 1.000. Para responder a esta cifra en caso de que se continúe incrementando de esta manera, el Estado y las EPS están adecuando lugares e implementando a gran velocidad camas hospitalarias de emergencia para atender a los enfermos y perder el mínimo número de vidas posible. Incluso reconocidas empresas privadas, como lo es Corferias, están aportando a la causa, facilitando algunos pabellones del recinto ferial, para que operen como centro hospitalario, si la situación se agrava, como muchos predicen que sucederá.
El Gobierno del Presidente Duque en coordinación con los Gobernadores y Alcaldes está trabajando día y noche para poder brindar ayuda y apoyar tanto a las familias más pobres como a los trabajadores informales, que posiblemente son quienes más sufren económicamente las circunstancias actuales.
Uno de los temas más urgentes es conseguir las pruebas de diagnóstico necesarias y suficientes para identificar a las personas que están infectadas, ya que hay personas a las cuales no se les ha podido hacer el examen del coronavirus por falta de los reactivos necesarios, sin poder identificar si han contagiado más personas del censo que se lleva. También es de alta urgencia contar con los respiradores que permitan atender a los pacientes. Se que se están haciendo los esfuerzos para lograr obtener estos elementos lo más rápido posible, pero ojalá lleguen al país en el tiempo adecuado para poder afrontar esta situación.
Por su parte, las pequeñas y medianas empresas ya tienen problemas incluso para pagar sus nóminas. El Presidente de la República ha anunciado mecanismos de financiación, como también los ha anunciado para los créditos blandos, mayores plazos, con tiempos muertos de intereses que permitan sobrevivir a los empresarios. Sin embargo, ya hay empresarios acudiendo a entidades bancarias en búsqueda de un apoyo y han recibido respuestas que no concuerdan con la política de Gobierno. Por el contrario, la respuesta no refleja disposición de refinanciar en iguales o mejores tasas, sino que como las condiciones financieras de las empresas han cambiado y ahora tienen mayores riesgos, las tasas de intereses les son incrementadas. Cuidado señores miembros del sector financiero, porque lo que les puede ocurrir es que se les acabe su negocio al enterrar financieramente a todos sus clientes.
Por último, es claro que de aquí al 13 de Abril no veremos el fin de la pandemia. Ya la Alcaldesa de Bogotá, atribuyéndose funciones que en mi concepto le corresponden el Gobierno nacional, anunció que las restricciones de movilización así como las disposiciones de aislamiento irían mínimo hasta el mes de junio.
Es verdad que está situación se puede presentar, pero el Presidente de la República tiene que medir las consecuencias no solamente sanitarias sino también económicas y de seguridad. No quiero decir que el aislamiento no sea de vital importancia, pues sino queremos que la pandemia nos coja absoluta ventaja en esta guerra, cada uno de nosotros debe comportarse adecuada y responsablemente.
Que Dios nos ayude y podamos los colombianos salir de la mejor manera de esta pandemia. Sin la colaboración de todos nosotros, aunque se dicten medidas adecuadas, si no se cumplen, corremos el riesgo de sufrir más.
Y si se presenta hambre en las familias, por penas que se anuncien aún de cárcel, a la gente no la detendrá nadie.