Una estrategia para adaptarse a la crisis que vive, entre muchos sectores, el mundo del entretenimiento a causa de la pandemia del Coronavirus es lo que la Sociedad de Autores y Compositores de Colombia (Sayco) ha venido implementando con el “Manual de Tarifas para Eventos Virtuales”, en el cual se definen los valores que se deben pagar por el uso y la interpretación de obras musicales en plataformas privadas o particulares.
Este mes Sayco publicó en su página web el Manual Tarifario para que, a pesar de las restricciones como el aislamiento social, se continúen con las obligaciones de gestión, recaudo y distribución de derechos patrimoniales de autor de sus socios.
El Manual está dirigido a los artistas, productores, empresarios y organizadores de eventos musicales que utilicen obras musicales representadas y administradas por la Sociedad en plataformas diferentes a las permitidas por la Organización Iberoamericana de Derecho de Autor (Latinautor). Facebook, Instagram, YouTube, Spotify y Deezer son algunas de estas plataformas que son licenciadas por la organización, lo que significa que los usos de música a través de estas aplicaciones no son objeto del cobro sugerido en el Manual Tarifario.
Aunque esta iniciativa sea una salida ante la actual emergencia de salud implementar el Manual, el cual está publicado en la página web de Sayco, no será camisa de fuerza, ya que según lo indicó el director jurídico de la Sociedad, Ricardo Gómez “los artistas que a la vez son dueños de sus obras musicales y realizan conciertos virtuales a través de sus redes sociales no son sujetos de cobro del derecho de autor”.
La Sociedad cobra el legítimo derecho que tiene el titular de la obra musical quien ha sido el más afectado por la pandemia, es así como lo afirmó el Director César Ahumada, gerente de Sayco, quien además aseguró que “El recaudo por las plataformas digitales se realiza desde el año 2014, nuestros compositores al no recibir el recaudo de los espectáculos públicos, han tenido una pérdida inmensa en sus ingresos y merecen que le sea reconocido la utilización de sus obras, cabe anotar, que son nuestros socios, los compositores, quienes dependen del interprete para que su canción sea reconocida, sonada y escuchada por los amantes de la música”.