El día de mañana se cumplirá en Miami, estado de La Florida, en Estados Unidos, la audiencia de culpabilidad al exfiscal anticorrupción Luis Gustavo Moreno, quien es acusado en ese país de lavado de dinero y fraude electrónico.

Moreno, quien fue extraditado hace unos meses a ese país junto con su socio Leonardo Pinilla, también abogado, es procesado por las exigencias de coimas que habría realizado en suelo norteamericano al prófugo exgobernador del departamento de Córdoba, Alejandro Lyons, supuestamente para favorecerlo en un proceso que en Colombia le adelanta la Corte Suprema de Justicia.

Moreno confesó en Colombia que hizo parte de una red que habría operado en el alto Tribunal -conocida como el ‘Cartel de la Toga’- para favorecer con fallos amañados a congresistas y otros políticos.

La audiencia de culpabilidad contra Moreno y Pinilla estaba fijada para el lunes de la semana anterior, sin embargo a última hora se determinó aplazarla para este 14 de agosto, según decisión de la jueza a cargo del caso Ursula Ungaro.

El pasado 30 de mayo, Moreno Rivera se declaró no culpable del delito de lavado de activos en su primera comparecencia en una corte de Miami.

La investigación contra Moreno y Pinilla estableció que se reunieron en Miami con el exgobernador Lyons, sin saber que éste colaboraba con la justicia norteamericana. Ello permitió a la DEA gravar las conversaciones en donde Moreno -quien ya para el momento fungía como fiscal anticorrupción designado por la administración del fiscal General, Néstor Martínez- y su socio Pinilla le solicitaron 134.000 dólares a cambio de ayudar al exgobernador en la investigación que le adelanta la Corte Suprema de Colombia.

Moreno ya fue condenado por la Corte en uno de los procesos que adelanta en su contra a cuatro años, diez meses y 15 días de prisión por los delitos de concusión y utilización indebida de información oficial privilegiada, conductas en las que incurrió como abogado litigante.

El exfiscal se acogió sentencia anticipada, lo que fue validado por la Sala, rebajándole la mitad de la pena al tener en cuenta la colaboración que ha hecho a la justicia colombiana en la investigación del ‘Cartel de la Toga’.

Los cuatro años de prisión deberá pagarlos en Colombia una vez regrese de Estados Unidos. También está pendiente otro proceso por los delitos cometidos como fiscal.