También conocida como Tonina (Inia geoffrensis), habita en la Amazonía y la Orinoquía, y enfrenta amenazas como, el cambio climático, la contaminación del recurso hídrico, la pérdida de hábitat, la cacería y el conflicto con actividades pesqueras.
Entre las amenazas directas que enfrenta el delfín rosado se encuentra que en muchas ocasiones quedan atrapados en las mallas de pesca por la sobreexplotación del recurso y, además, es cazado deliberadamente por el conflicto con pescadores, puesto que las comunidades rurales tienen una percepción negativa de la especie al considerarla un predador de los peces atrapados en las redes.
Este ejemplar que se encuentra catalogado como vulnerable en Colombia, se distribuye por las cuencas de los ríos Amazonas y Orinoco, donde también es víctima de uso y comercialización de sus ojos, dientes, genitales y piel.
Otro de sus desafíos es el cambio climático, dado que en la Orinoquia Colombiana se espera un aumento en la temperatura de 2,7°C para el año 2050, así como la reducción en la precipitación de entre el 10% y 20%, lo que favorece los procesos de desertificación de las sabanas y el bosque basal.
Al mismo tiempo el acelerado cambio en el uso del suelo ha ocasionado un aumento significativo en el desarrollo de actividades como la ganadería extensiva, los cultivos de palma africana, arroz, maíz y forestales.
El también conocido como delfín del Amazonas, es una especie única del Amazonas, considerado el delfín de río más grande del mundo, llegando a medir hasta 2,15 m (hembra) y 2,55 m (macho) y pesando hasta 150 kg (hembra) y 185 kg (macho), las crías nacen pesando 80 kilogramos.
Los delfines van tornando de color dependiendo de su edad, una cría tienen una tonalidad grisácea oscura, en su adolescencia son de un gris más claro y al llegar a la madures total se tornan rosados, siendo más notorio en los machos que en las hembras. La piel de los delfines adultos puede tener dos variables diferentes, ya sean de un tono rosado total o tener manchas a lo largo de sus cuerpos.
Se cree que el cambio de color de los delfines se debe a la densidad del agua y a su ubicación geográfica, es decir que los delfines del Orinoco son diferentes a los delfines del Amazonas. Es uno de los cetáceos con mayor diferencia entre géneros, ya que el macho mide un 16% más que la hembra y pesa un 55% más.