Con el fin de que las familias, jóvenes, académicos y público general, compartan y puedan conocer más acerca de la especie y la conservación de la misma, hoy se celebra el Carnaval del Oso de Anteojos.

De acuerdo con la Fundación Santuario del Oso de Anteojos, se abordará el tema desde una perspectiva multidisciplinar que demostrará cómo todos podemos aportar al cuidado de los Osos de Anteojos y los Bosques de la región Andina.

Este año será la primera edición del Carnaval del Oso de Anteojos que se realizará a través de una plataforma virtual en la web del Santuario de Oso de Anteojos: www.santuarioosodeanteojos.org

“Hemos creado una programación para que todos podamos participar, con actividades culturales, académicas y para toda la familia. Tendremos clases de yoga, música en vivo, charlas con especialistas en la especie y ¡más! Consulta nuestras redes y página web para más información”, informó la Fundación.

Añadió que “estaremos promoviendo una campaña de donación de fondos que serán destinadas para los programas de educación, conservación, rescate, rehabilitación, liberación y seguimiento realizadas por el Santuario del Oso de Anteojos. Entre todos podemos aportar a hacer de todos los programas una realidad”.

El Oso de Anteojos ( Tremarctos ornatus) es una especie clave para la conservación del ecosistema de Bosque Andino y el Páramo, porque cumple la función de jardinero polinizador; eso garantiza la continuidad y calidad de las  fuentes de agua de las que todos nos beneficiamos. Es por eso que cuidándolo, “no solo cuidamos de todos los animales del bosque sino de nosotros mismos”. 

En el Santuario del Oso de Anteojos  en Guasca, Cundinamarca, por ejemplo, está Bambi, una osa de anteojos recuperada hace más de una década de un circo ecuatoriano que deambulaba por el país. “A Bambi le fueron amputadas las garras de sus manos, incluyendo las falanges, motivo por el cual no puede buscar su alimento en la vida silvestre, trepar árboles, ni defenderse de los predadores ocasionales, además perdió la vista el ojo derecho consecuencia de la actividad del circo. Deberá permanecer en un recinto el resto de sus vida, pero por fortuna con nosotros no en el circo”, indicó la Fundación.   

Así mismo, Puinawai y Sibundoy son una pareja de hermanos los cuales fueron capturados por campesinos en el Alto Putumayo, y representan los individuos más pequeños que se tengan reportados al momento de su captura. Actualmente se mantienen  aislados de contacto humano con la idea de volverlos pronto a la vida silvestre.

De la misma manera, Wuari, oso cundinamarqués recientemente se incorporado, es un oso macho adulto, el cual fue recuperado cerca de una vivienda.