La inseguridad es el problema que más ha aquejado a los bogotanos en este 2022, de acuerdo con el secretario de Seguridad, Convivencia y Justicia, Aníbal Fernández de Soto, quien considera que en el Plan Nacional de Desarrollo (PND) deben quedar dos cosas: un aumento de pie de fuerza y un mejoramiento en los sistemas de judicialización.

EL NUEVO SIGLO: ¿Qué debe quedar incluido en el PND en materia de seguridad?

ANÍBAL FERNÁNDEZ: La perspectiva de la Administración de Bogotá es la de los bogotanos, porque nosotros hacemos un diálogo permanente con ellos y lo que recibimos de sus necesidades, de sus inquietudes y de sus urgencias, es que Bogotá necesita más pie de fuerza. Tenemos que llegar a por lo menos 24 o 25 mil policías para poder cubrir todas las necesidades que tiene la ciudad en materia de seguridad y convivencia. Y si eventualmente se puede avanzar en una capacidad específica, estamos dispuestos a estudiarlo. Pero también necesitamos que haya una reforma legal para garantizar que el sistema penal funcione articuladamente y que los delincuentes que son capturados por la Policía estén en la cárcel. En ese sentido, hemos avanzado en un proyecto de ley que aborda esa temática.

Lo que le hemos planteado al Gobierno es que los dos temas principales que queremos que queden bien dimensionados en el PND son: aumento permanente del pie de fuerza, una policía cercana al ciudadano, especializada, que conozca la ciudad; y una legislación que permita a los jueces aplicar disposiciones para mandar a la cárcel a los delincuentes.

ENS: La alcaldesa se ha referido en varias ocasiones a que haya una policía para Bogotá y Cundinamarca, ¿qué opina al respecto, teniendo en cuenta que esta es una intención de vieja data?

AF: Aspiramos a que la Policía en Bogotá esté especializada para atender los problemas específicos de la ciudad. Es distinto lo que enfrentamos en una ciudad del tamaño de la nuestra, a lo que se enfrenta en La Guajira, en los Llanos o en las zonas rurales del país. Entonces lo que hemos propuesto es que desde Bogotá podemos contribuir con la capacitación, la formación, la dotación, las especificidades que se requieren en el servicio de la Policía en Bogotá, lo podemos articular con el Gobierno nacional y si eventualmente eso puede, en el marco de la reforma de la Policía que se está discutiendo por parte del nuevo gobierno, avanzar en una capacidad específica para Bogotá, estamos dispuestos a estudiarlo. El año pasado, con recursos del Distrito logramos formar policías que en 2022 van a prestar servicio en Bogotá, 1.500 uniformados entran en diciembre gracias a los recursos de los bogotanos. Ese tipo de instrumentos los podemos orientar para que la Policía tenga esas especialidades, esas competencias de cercanía con el ciudadano, de atender las distintas particularidades que tenemos en la ciudad.  

ENS: La alcaldesa ha dicho que la Ley de seguridad ciudadana no está funcionando. ¿Usted coincide con ella?

AF: Lo que encontramos fue que en enero se sancionó la Ley de seguridad ciudadana, esa norma tiene dos disposiciones específicas que nosotros desde la Administración distrital impulsamos. Uno, cualquier delito cometido con cualquier tipo de arma da lugar a cárcel; y dos, la recurrencia de ese delincuente que es capturado varias veces pero que no lo dejan en la cárcel porque es un delito de menor cuantía, lo dejan libre, lo vuelven a capturar, eso también está agravado en la Ley de seguridad ciudadana y lo que encontramos es que en el transcurso de este año son nueve mil los delincuentes capturados que han quedado libres. Se reformó la ley, pero no se está implementando. La Ley de seguridad ciudadana no se está implementando adecuadamente.