UN duro revés sufrió la bancada demócrata en el Senado de Estados Unidos por la decisión de la parlamentaria Kyrsten Sinema de abandonar el Partido y registrarse como independiente, debilitando la escasa mayoría del presidente de Estados Unidos en esa Cámara.

"Me he registrado como independiente por Arizona. Sé que hay gente que se va a quedar un poco sorprendida, pero creo que tiene bastante sentido, porque nunca he encajado cómodamente en ningún partido", declaró esta legisladora de 46 años, en entrevista a la cadena CNN.

Este anuncio echa por tierra las esperanzas del líder demócrata de gobernar con más margen durante el resto de su mandato.

En los últimos dos años, el partido de Biden tuvo que lidiar con una estrecha mayoría en la cámara alta.

La victoria a principios de esta semana de un demócrata en el estado de Georgia, con Raphael Warnock, en el marco de las elecciones de medio mandato, debería garantizarle un escaño adicional. Es decir, 51 contra 49 de los republicanos.

Sin embargo, algunos analistas consideran que la situación se mantendrá inalterable ya que el partido de gobierno mantendrá su ajustada ventaja gracias al respaldo de los senadores independientes Bernie Sanders (Vermont), uno de los iconos del progresismo demócrata, y Angus King (Maine).

Sinema, ya conocida por haber enterrado algunos de los proyectos de Biden en el Congreso, incluida una importante reforma electoral, prometió que "nada cambiaría" en su comportamiento. "Y no creo que cambie mucho para Arizona", aseguró.

Durante un viaje a Arizona esta semana, Biden elogió la acción de esta senadora, llamándola "una gran defensora del pueblo de Arizona y una líder en muchos temas clave para este estado".

Tanto Sinema como el senador demócrata por Virginia Occidental, Joe Manchin han actuado en los últimos meses como obstáculos a la adopción de proyectos de ley de la Casa Blanca como el plan de impulso económico Build Back Better o la eliminación de la figura del filibustero en el Senado, lo que valió a Sinema una amonestación de su propio partido Demócrata de Arizona.

"Para mí, la decisión de desentenderme de la estructura de partidos no solo es un ejercicio de honestidad para conmigo misma y mi forma de ser, sino que otorgará un refugio para mucha gente del país que está cansada del partidismo", argumentó.

Sinema, que en la entrevista televisiva eludió responder a preguntas sobre su posible reelección o su respaldo a Biden de cara a las elecciones de 2024, acabó defendiendo su labor en el Senado como "líder de esfuerzos históricos en proyectos de infraestructura, protección de libertades religiosas, control de armas o ayuda a veteranos de guerra":

"La lista es realmente larga y creo que los resultados hablan por sí mismos, así que me parece bien que algunos no estén cómodos con mi forma de actuar", concluyó.