El Dane, Departamento Administrativo Nacional de Estadística, entregó la semana pasada el informe correspondiente al 2016 de las Cuentas Nacionales. Arango Londoño sostiene que las Cuentas Nacionales hacen referencia al concepto de producto, el cual corresponde a la suma del valor monetario, a precios del mercado, de los bienes y servicios producidos en determinado período (Arango, Londoño Gilberto, Estructura Económica Colombiana, 2005, Mc Graw Hill).

Teniendo en cuenta lo anterior, vayamos por partes para comprender los fenómenos que se están presentando en la economía colombiana.

El primer dato que debemos tener en cuenta corresponde al Producto Interno Bruto, PIB, el cual creció en un módico 2% siendo el más bajo en los últimos siete años de gobierno de JMS.

No deja de ser paradójico, por lo demás, que mientras la economía colombiana en general apenas crece el 2%, el sector financiero lo hizo a un ritmo del 5%. Mientras a todos los sectores de la economía colombiana les fue mal, a los bancos les va bien, muy bien. ¿Por qué?

Creería yo, que por dos factores: El primero, tiene que ver con los intereses de usura autorizados por el gobierno los cuales superaron el 32.5% efectivo anual,  2.25% efectivo mensual, junto con el deterioro de la cartera morosa la cual se acerca a niveles alarmantes del 11%, a los bancos les fue bien porque cobraron esos intereses de mora y de usura sin contemplación alguna frente a las imperiosas necesidades de recursos económicos tanto del sector privado, como de consumo en general.

El segundo corresponde al incremento a la tasa de interés interbancaria aproximada del 8% durante el 2016. Esto produjo el encarecimiento de los créditos sumado a la baja calificación de riesgo del sector financiero colombiano en b.

No deja de ser paradójico que entre más baja sea la calificación de riesgo para el sistema financiero colombiano, mejor sean sus utilidades.

A lo anterior se le debe sumar el desempleo de dos dígitos en enero: 11.7%; siendo la segunda tasa de desempleo más alta de América Latina. La tasa de desempleo a dos dígitos tiene una repercusión directa en lo que el Dane llama: La proporción de ocupados informales. La mitad de la población activa ocupa un empleo informal.

El saldo de la deuda pública superó el 40% del P.I.B al cierre del 2016, niveles de deuda externa que no se veían desde hace 13 años. Hace tres años apenas se encontraba en el 20% del P.I.B.

(http://www.portafolio.co/economia/gobierno/deuda-externa-colombia-supero-40-pib-2015-495161)

Por lo anterior, los presupuestos para el 2017 tanto del sector privado, como público e individual deberán ajustarse en todos los rubros con el 7% vs. el 5% del 2016, teniendo en cuenta que la inflación cerró con un 6.5%, la más alta en los últimos años. El precio de una libra de salmón para el 2016 $ 19.800 vs $25.300 para el 2017, + 21%.

¿Doctor, cómo se encuentra el paciente?, Pregunta el familiar. Crítico, pero estable, responde el doctor. Así, se encuentra la economía colombiana en estos momentos. Crítica, con fuertes tendencias a inestable.  Lo que resulta inexplicable es cómo la economía colombiana a pesar de todos los embates del Gobierno de JMS para acabar con ella todavía crece al 2%. Increíble, ¿no?

Puntilla: Mientras que a Andrés Felipe Arias le hacen la vida imposible en los EE.UU, las ministras impolutas de JMS de paseo por EE.UU