La señora vicepresidenta, con motivo de su viaje al África, confirmó que se abriría una embajada en Senegal, lo que me dejó dubitativa acerca de por qué no volver a reabrir nuestra embajada en Costa de Marfil, país a quien le debemos tanto por su trabajo mancomunado con Colombia y la Federación de Cafeteros y con el que se tiene muchos amigos de su clase dirigente.

Me encantaría que tuviéramos muchas embajadas en África, tal como Venezuela con 23, contra tres de nosotros en la África Subsahariana y el mismo número al norte de este continente. Sin embargo, ante nuestra difícil situación económica entiendo que es complejo hacerlo, y por eso se hace tan importante ser muy cuidadosos con los países que elegimos. De ahí que me permito dar mi percepción de por qué me inclino más por Costa de Marfil que por Senegal. Los dos son países hermosos, llenos de una gente amable risueña, abierta al extranjero y con muchos deseos de entablar relaciones con Latinoamérica.

Para la toma de decisiones en esta materia, si yo fuera Canciller, estudiaría el pasado, el presente y el futuro de las relaciones con cada uno de estos países.

Como uno de los objetivos de Colombia es abrir negocios y expandir el campo comercial en África, creo que es bueno revisar los indicadores que nos permitan visualizar las fortalezas de estos países.

Costa de Marfil es un país con una superficie de 322.460 kilómetros, cuenta con 27’478.249 habitantes. Senegal tiene a su vez, una superficie de 196,710 Km y una población de 16’876.720. Costa de Marfil le dobla en población, aspecto este importante comercialmente.

El producto interno bruto anual (PIB) es la suma de las exportaciones, servicios realizados, construcciones, ventas internas y demás. Costa de Marfil tiene un PIB de 59.221 € y Senegal de 23.354.(E) La deuda externa de Costa de Marfil es de 37.719 (€) mientras que la de Senegal es de 170.850(€)

Los dos países mayoritariamente son islamistas, usan la misma moneda que es el Franco CFA. Los dos están afiliados a los mismos Organismos Africanos e Internacionales: CEDAO, ACP. FMI, ONU, UEMOA.

Tanto Costa de Marfil como Senegal fueron enclaves usados por Francia, su colonizador, para la extracción y transporte de materias primas, dado sus riquezas naturales y el hecho de contar con dos puertos sobre el mar Atlántico: Abijan y Dakar.

Después de su independencia, Houphouet Boigny decidió no romper la influencia francesa en el manejo administrativo, de manera que no se dieron rupturas, lo que ayudo a Costa de Marfil en convertirse en el Milagro Africano, en la Perla de África, La Petit-Paris, por sus rascacielos, su elegancia, su infraestructura desarrollada con la exportación y las ganancias del café, cacao, tabaco especialmente y oro, gas, petróleo, frutas tropicales, caucho, piedras preciosas, maderas. En general, estos mantuvieron un buen nivel de vida. En el 99 vino un golpe de Estado y una guerra civil que los llevo a una seria crisis. A partir del 2002 comenzó su resurgimiento, con la ayuda de la OCDE. En las últimas décadas ha mantenido un crecimiento del 7% anual. Senegal ha venido creciendo con sus exportaciones de cuero, nueces, ácido fosfórico y sus nuevos descubrimientos de petróleo y gas.

Costa de Marfil se ubica en el índice 110 y Senegal en el 123 del Ranking Doing Business, facilidad para hacer negocios. Su índice de corrupción es 37 frente a 43 de Senegal. Estos últimos se ubican en el lugar 143 en el índice de calidad de vida, frente al 59 de los marfileños, de un total de 196. Los marfileños gastan en defensa 5.01, de su presupuesto, los senegaleses 410.5. En salud estos últimos invierten un 3.8 frente a 5.10 de Costa de Marfil y en educación 11.5 frente a 19.76 de los marfileños.

Estos indicadores, más la confianza que hay con Colombia, las relaciones ya tejidas y mantenidas con Costa de Marfil me hace inclinar más por reabrir nuestra embajada allí. Los planes prospectivos hacia futuro y las bases de un acuerdo comercial que dejé firmado, facilitarían mucho la apertura comercial. Buena parte de la población habla español, especialmente las nuevas generaciones, esto ayudaría mucho a los empresarios para abrir caminos en este país.