HORACIO GÓMEZ ARISTIZÁBAL | El Nuevo Siglo
Domingo, 19 de Enero de 2014

Luto en la zona Caribe

“Jorge Consuegra Higgins, más que un educador fue un visionario”

 

Fue emblemática la fecunda existencia del gran educador, pensador, fundador de memorables centros educativos, autor de impactantes libros y líder cívico excepcional José Consuegra Higgins. La sola fundación de la Universidad Simón Bolívar en Barranquilla con 12.000 alumnos y considerada por la crítica más autorizada como uno de los mejores focos de irradiación cultural de Colombia, bastaría para enaltecer a un ciudadano. Pero José Consuegra Higgins no solo le dio vida y fortaleza y esplendor a la Universidad Simón Bolívar, sino que ejecutó multitud de hechos trascendentales. En todo el continente americano y a la cabeza de los economistas más famosos, realizó una poderosa campaña de adoctrinamiento académico, colocando al Nuevo Mundo en un sitio de sólido prestigio humanístico.

Consuegra Higgins entregó a la cultura internacional 32 libros de su autoría, obras clásicas, pues fue un investigador, un innovador y un creador de teorías luminosas. Impresiona la importancia que le dio al fondo de publicaciones. No hubo escritor consagrado de América y de Colombia que no contará con el apoyo decidido de este varón ejemplar para patrocinar la edición de valores meritorios.

El fervor de José Consuegra por Bolívar fue tan poderoso que lo llevó a dedicar un enorme edificio de cuatro pisos, para exhibir en vitrinas gigantescas miles de obras escritas sobre el libertador de América. El catedrático Consuegra Higgins durante años y años hizo circular por todos los países revistas muy valiosas en que escribieron hombres como Arturo Uslar Pietri, Vargas Llosa y otros autores consagrados. Repetía: “Los latinoamericanos nos unimos o nos hundimos… Unidos somos más y valemos más”.

También tuvoel enorme talento de vincular, desde siempre a sus impactantes proyectos a toda su familia. Anita Bolívar de Higgins ha tenido la más delicada misión. Manejar con transparencia ejemplar las finanzas de la Universidad Simón Bolívar. Su hijo, exsenador de la República Dr. José Consuegra Bolívar, es rector eficientísimo. Con pujanza le ha ensanchado y ha logrado superar todas las exigencias del Ministerio de Educación en el campo de la acreditación. En multitud de áreas económicas y sociales abundan, los profesionales formados moral e intelectualmente en la Universidad Simón Bolívar. El altruismo de José Consuegra Higgins lo impulsó a estimular la educación de muchos jóvenes talentosos, pero sin recursos monetarios. A pesar de que lo que daba su mano derecha, no lo sabía la izquierda, transcendían los auspicios a figuras muy representativas que habían venido a menos en materia de recursos materiales.

Por lo dicho y por otras realizaciones admirables de José Consuegra Higgins, se le tenía como un patrimonio común de la región Caribe y encarnó la leyenda mitológica según la cual, entre más daba y donaba a sus semejantes, más se incrementaba su vigor en todos los órdenes. El dinero por el dinero mismo es deshumanizante. La sola codicia llena el baúl de monedas, el cuerpo de ulceras y la conciencia de remordimientos.

Para orgullo de Colombia y de la costa Caribe, la Universidad Simón Bolívar cada día incrementa más y más su fama por aquello de “La excelencia académica”. La calidad se impone. Y el problema prioritario de los países tercermundistas es el subdesarrollo cultural. Mientras no capacitemos a la juventud para salir de la pobreza, del atraso y de la ignorancia seguiremos en la exclusión y en la marginación. Un príncipe en Asia, antes de empezar su gobierno le pidió asesoría a un sabio. Éste le expresó: si quiere un plan para un año cultive un jardín; si desea un proyecto para 10 años siembre bosques, pero si anhela un plan para un siglo, Eduque al pueblo.