Si existe una palabra en la que se puede definir el campeonato colombiano es el equilibrio. El segundo semestre del año estuvo acompañado de un alto nivel competitivo que les permitió a algunos deportistas dejar huella con rendimientos individuales muy altos.

Con el campeonato finalizado, fueron varias las figuras que se ganaron las portadas por su comportamiento. Nombres como el de Rafael Carrascal no dejaron de retumbar en la afición debido a su capacidad para robar balones y aportes tácticos con el conjunto de Alexandre Guimaráes, quien es el entrenador del año por el papel que cumplió con el América de Cali.

Entretanto, el liderazgo y la experiencia de jugadores como Sebastián Viera y Germán Ezequiel Cano terminaron completando un rol vital para sus conjuntos. El portero del Junior llegó a la final, mientras que el artillero del DIM alzó la Copa Águila con el poderoso en un duelo muy disputado con el Deportivo Cali.

El esfuerzo y la dedicación premiaron a los escarlatas con su estrella 14, sin embargo, no se puede dejar a un lado el trabajo de equipos como el Junior, Tolima o Medellín que accedieron a la Libertadores después de un año lleno de altas y bajas en el FPC.

Arquero

Sebastián Viera: el guardameta del Junior le ayudó a los tiburones a llegar a su tercera final consecutiva con su liderazgo, experiencia y serenidad, en especial en los cuadrangulares, donde cumplió con una función brillante en encuentros clave como el que vivió ante Nacional. En esta posición también podría estar Neto Volpi, portero campeón del América, o Leandro Castellanos, quien completó más de 10 partidos sin recibir gol.

Defensas

Daniel Muñoz: con tan solo 23 años de edad el joven de Nacional se ganó un espacio en el once inicial de Juan Carlos Osorio con sus anotaciones, potencial para llegar al ataque y buena pegada. Fue positivo su rendimiento, incluso estuvo convocado por la Selección Colombia para los amistosos de septiembre a los que no pudo asistir por lesión.

Luciano Ospina: el zaguero sorprendió con Alianza Petrolera cuando terminaron siendo protagonistas de una campaña de ensueño con los de Barrancabermeja. La escuadra de César Torres se caracterizó por mantener un orden en la línea del fondo y el trabajo de Ospina es clave para el planteamiento.

Julián Quiñones: ante la sanción de Álvaro Montero por doping, el central del Tolima tomó la banda de capitán del conjunto ‘pijao’ y resaltó ofreciendo liderazgo en la defensa, espacio en donde los ibaguereños son venerables. Además de Quiñones, en este lugar sobresalieron Rafael Pérez del Junior y Juan Pablo Segovia del América.

Danovis Banguero: es cierto que Tolima cuenta con una defensa que maneja inconvenientes en los retrocesos, sin embargo, rendimientos individuales como el del lateral izquierdo le brindaron al plantel salida y ofensiva. Banguero es una de las cartas que quiere barajar Gamero para Millonarios.

Mediocampistas

Rafael Carrascal: luego de una serie de inconvenientes contractuales entre Tolima y América, el volante de marca tuvo un rol fundamental en la obtención de la estrella 14 de los diablos rojos. Guimaráes elogió al jugador tras vencer al Junior en la final por su rendimiento y capacidad para ir al corte.

Luis Paz: una de las razones por las cuales América se quedó con el título fue el manejo de su línea de volantes. Con el trabajo de Carrascal, Paz contó con más espacio en el terreno y le dio balones a los delanteros de forma constante en todos los partidos. Al igual que Paz, Víctor Cantillo gozó de un desempeño formidable con el cuadro tiburón, aunque bajó un poco tras los rumores que lo vinculaban con apuestas y casinos.

Carlos Sierra: sin mayor espacio monetario, la directiva de los americanos le apostó a la contratación de este jugador, que no venía con tanto nombre pero que resaltó por su capacidad para aportar en el área contraria. De igual forma, supo administrar de manera adecuada la presión de un grande y ahora no piensa en otro objetivo diferente a la Copa Libertadores.

Delanteros

Jarlan Barrera: después de un semestre agridulce con Rosario Central, el exjugador del Junior regresó al F.P.C. y mostró un estado físico excelente. Además de ello, con su técnica le brindó a los verdolagas llegadas y peligro en las pelotas quietas. Otro hombre que estuvo a la altura en la creación fue Alex Castro, volante ofensivo que jugó con el Deportes Tolima en condición de préstamo, su pase pertenece al Cali.

Michael Rangel: si existe un responsable por el título del América es este delantero, que anotó 14 tantos y tras ser suplente en el Junior se convirtió en una llave de gol indispensable para el cuerpo técnico de los escarlatas. Aún se desconoce si continuará con los de Cali, ya que tiene ofertas del fútbol mexicano.

Germán Cano: en su última campaña en el fútbol colombiano Cano demostró una vez más que es uno de los grandes delanteros que pasaron por la Liga. El argentino marcó 13 goles sin clasificar a cuadrangulares, estadística envidiable. Asimismo, alzó el título de la Copa con el Medellín, club con el que no quiso renovar para buscar nuevas oportunidades.

Director Técnico

Alexandre Guimaráes sorprendió con un planteamiento que toma como punto de partida el orden en la línea del fondo con el América y llegó a la definición del título, que le ganó al Junior en una final en donde los escarlatas dominaron durante los dos encuentros. Sin una nómina amplia y con algunos inconvenientes en el transcurso del campeonato, el brasileño obtuvo un espacio en el corazón de los aficionados de los diablos, dándoles un cupo a la Copa Libertadores. En ese sentido, Julio Comesaña merece un espacio en el top por clasificar al Junior a su tercera final consecutiva.