Aunque no está asustado por el desafío de levantar al equipo de una racha desastrosa, los problemas que tiene que resolver son grandes 

El Real Madrid ha dado un golpe sobre la mesa volviendo a llamar a Zinedine Zidane, pero el momento de su llegada plantea interrogantes: el francés va a tener que gestionar un final de temporada sin desafío mayúsculo, mientras espera para reconstruir el vestuario.

El club español, lejos en la Liga y eliminado de Copa del Rey y 'Champions', ha recobrado la sonrisa al mismo tiempo que el rumbo el lunes con la vuelta de su antiguo entrenador, ganador de tres Ligas de Campeones en dos años y medio (2016-2018).

Pero 'ZZ' no podrá salvar al Real Madrid de una temporada en blanco, a menos que se produzca una increíble remontada en Liga, donde el líder, el Barcelona, le lleva doce puntos de ventaja a once jornadas para el final del campeonato.

Al inicio de su primer mandato en el banquillo 'merengue', en enero de 2016 tras la salida de Rafael Benítez, la situación iba mal en Liga, pero quedaba la 'Champions' para brillar.

Zidane la ganó, ayudado por su gran estrella Cristiano Ronaldo, autor de un triplete salvador en cuartos de final contra los alemanes del Wolfsburgo, soprendentes vencedores en la ida 2-0. 

Esta vez, el delantero portugués no está y la Copa de Europa tampoco.

'Un buen momento'

"Decisión genial, está bien verlo regresar. Lo hizo bien la última vez", reaccionó Gary Lineker, antiguo internacional inglés en Twitter.

El mismo entusiasmo mostró Bixente Lizarazu, campeón del mundo en 1998 con su amigo Zidane: "Creo que de nuevo es un buen momento", dijo en RTL, describiendo a un hombre que "vuelve en plena forma, puede que con nuevas ideas, una pasión y una motivación enormes".

Para el exdefensa de los 'Bleus', el nuevo entrenador del Real Madrid "probablemente ha obtenido las condiciones para ganar, es decir, regenerar esta plantilla".

Son numerosos, en efecto, los antiguos jugadores o seguidores del Real en mirar a la próxima temporada. La prensa internacional no ha tardado en nombrar una larga lista de potenciales fichajes con Eden Hazard (Chelsea) y Kylian Mbappé (Paris SG) en cabeza.

"Zidane regresa con plenos poderes", afirma este martes el diario deportivo AS, mientras que el rotativo El Mundo escribe que el francés dispone de "carta blanca para renovar el vestuario".

En Francia, L'Equipe sigue la misma línea, con una viñeta en la que se ve a Zidane exclamar ante un montón de lingotes de oro: "¡¿Wao todo eso para fichar?!. "No eso es tu salario... el presupuesto para el mercado está detrás", le responde el presidente del club, Florentino Pérez, mostrando a su espalda un botín aún más gordo.

"Me gustan los dos", dijo el presidente del Real Madrid el lunes, preguntado por si le gustaba más Neymar o Mbappé.

Mourinho o Heynckes

Mientras espera a tirar de chequera, Zidane tiene como misión volver a motivar a un vestuario herido por las bofetadas del Barça, vencedor en dos clásicos con tres días de separación, y del Ájax, que noqueó al vigente triple vencedor de la 'Champions' tras un partido traumático (derrota 4-1 en el Bernabéu).

¿Revolucionará el vestuario? Sus antiguos protegidos Marcelo (al que se sitúa en la Juventus), Isco y Keylor Navas han sido poco utilizados por el técnico Santiago Solari. Tendrá además que lidiar con Gareth Bale, con el que el francés no está en los mejores términos.

Seguro de su fuerza, Zidane no parece asustado por el desafío. "Si pensara que voy a ponerlo (mi balance anterior) en juego, no volvería", dijo el lunes, hablando de un "mayor desafío" que su anterior paso por el club.

¿El antiguo N.10 de los 'Bleus' tendrá un destino parecido al de José Mourinho? ¿O será más cómo el de Jupp Heynckes? La vuelta al Chelsea del primero (2013 a 2015) acabó mal. En cuanto al segundo, dio al Bayern de Múnich un brillante triplete Bundesliga-Copa de Alemania-'Champions' en 2013.