De continuar las presiones en el costo de vida por parte del rubro de alimentos, la inflación podría terminar este año entre 3,81% y 3,9%, de acuerdo con los analistas financieros.
De acuerdo con los analistas del Banco Itaú, “según la encuesta mensual del Banco Central, se espera que la inflación finalice 2019 en 3,81%, por encima del 3,70% esperado en septiembre, ya que los efectos del choque por el lado de la oferta en los precios de los alimentos aumentaron las expectativas”.
“Las expectativas para las medidas de inflación subyacente (excluyendo los precios de los alimentos) disminuyeron del 3,30% al 3,20% para la perspectiva de 1 año, y cayeron al objetivo del 3% para el horizonte de dos años (3,15% anteriormente). Mientras tanto, la tasa de política aún se ve estable en 4.25% hasta el primer trimestre de 2020, con un aumento de 25 puntos básicos a 4,5% previsto para abril de 2020”, sostienen.
Aseguran los investigadores que “otro posible aumento de 25 puntos solo se espera hasta el segundo semestre de 2020. En cuanto a la actividad (encuestada trimestralmente), el desempeño robusto en el primer semestre posiblemente llevó a los encuestados a elevar el pronóstico de 2019 en 0,1 puntos a 3,2%, pero el complejo escenario externo probablemente explica la moderación de las expectativas de crecimiento para 2020 de 3,5% a 3,3%”.
Los incrementos
En septiembre el Índice de Precios al Consumidor -IPC- presentó un incremento mensual de 0,23% y que, por lo tanto, la inflación anual subió desde 3,75% en agosto a 3,82%. Dicha aceleración se explicó porque la canasta de alimentos continuó presentando presiones importantes, sobre todo en el precio de las frutas, las legumbres y lácteos, y también por los ajustes en la tarifa de arriendos, educación y servicios públicos. Entre tanto, el cambio en los precios de los productos transables, aunque se aceleró, se mantuvo bajo y poco relacionado con la depreciación de la moneda vista en lo corrido del año.
Por su parte los economistas del Bancolombia señalan que “planteamos un pronóstico de inflación para octubre de 0,15% mensual, con una inflación anual asociada de 3,84%. Esta visión se soporta en un cambio mensual de 0,12% en la canasta de alimentos, que se compone a su vez de inflación estimada de 0,15% para alimentos consumidos dentro del hogar y 0,08% para restaurantes. Por su parte, estimamos que la inflación básica será más inflacionaria (0,16% mensual, 3,25% anual), y que en ella los no transables (0,18% mensual) y los regulados (0,2% mensual) tendrán un rol protagónico”.
La meta
Estiman los expertos que “hoy las posibilidades de observar una inflación de cierre de año cercana al techo del rango de tolerancia del Emisor son elevadas. En particular, un comportamiento promedio de los precios de aquí en adelante llevaría a la lectura a un nivel de 3,9%.
Sostienen los analistas de la entidad financiera que “en materia de precios, los riesgos al alza se materializaron y hoy hacen más probable que la inflación culmine en 3,9%, a solo 30 puntos básicos del escenario alcista que planteamos en nuestra última actualización”.
Aseguran que “es importante tener en cuenta que, detrás de la aceleración por la que están transitando los precios al consumidor, se encuentran fenómenos que son de carácter transitorio. Estos se deberían disipar con facilidad y no deberían conducir a un movimiento de la tasa de interés de política monetaria en el futuro cercano, en cuanto no se presente un incremento pronunciado en las expectativas”.